Las políticas de ajuste han empobrecido a la población de esta región, por lo que desde CCOO C-LM han reivindicado una Renta Mínima Garantizada (RMG) para las 762.793 personas de Castilla-La Mancha que estén en riesgo de pobreza o exclusión.
Los últimos datos hechos públicos hoy en la “Encuesta de Condiciones de Vida” del INE indican que la pobreza y la exclusión social en Castilla La Mancha continua en aumento, situándose en el 36,9% de la población de Castilla La Mancha. España y la región necesitan un sistema de rentas mínimas garantizadas para proteger a las personas que sobreviven sin ingresos.
Las cifras coinciden con la menor tasa de cobertura de las personas en paro en nuestra región que continua descendiendo alarmantemente, y que tan sólo es del 45,12%, mientras que en el conjunto del país asciende al 55,35%, si bien ambas han descendido en CLM lo ha hecho en tres puntos con respecto al año anterior. Además, en Castilla-La Mancha hay ya hay 132.173 personas en desempleo que han agotado todas sus prestaciones y subsidios, para las que CCOO exige, una de las primeras medidas a adoptar por el gobierno entrante, sea un Plan Regional de Empleo.
El aumento de la pobreza es incesante, consecuencia de las políticas de austeridad que, además, han acentuado las desigualdades existentes. La precarización del empleo, la reforma laboral, la destrucción de puestos de trabajo, están ocasionando el empobrecimiento de la población, tal y como ha puesto de manifiesto CCOO C-LM en sus últimos informes. La austeridad, la eliminación de los recursos de los servicios públicos, la persecución de las personas que tienen protección social, la disminución de las prestaciones y su baja cobertura, han provocado el salto cuantitativo de las personas empobrecidas tal y como hemos indicado.
Por todo esto, desde CCOO siguen reclamando la creación de un sistema de rentas mínimas garantizadas que generen una prestación no contributiva, que pueda mitigar el aumento de la pobreza en nuestro país.
Para finalizar, desde el sindicato aseguran que el Gobierno de Castilla la Mancha debe mirar a la gente que peor lo está pasando, a las familias que se encuentran en el umbral de la pobreza y que no saldrán de la recesión ni de su crisis particular sin una respuesta de los poderes públicos, que para eso están. No pueden darle la espalda, como ha hecho durante cuatro años el gobierno de Cospedal.
