El Gobierno de Cospedal derivó unos 15.000 pacientes a los hospitales privados

Según los propios datos de la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha, durante los últimos dieciocho meses de la legislatura del Partido Popular se derivaron casi 15.000 personas a diferentes clínicas privadas de Madrid y Valencia.

Según los últimos datos de la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha a los que ha tenido acceso periodicoclm.publico.es, durante los últimos 18 meses de Gobierno de María Dolores de Cospedal, un total de 14.975 personas fueron derivadas a clínicas y hospitales privados de Madrid y la Generalitat Valenciana.

El objetivo que tenían estas derivaciones eran reducir las enormes listas de espera que había en los hospitales castellano-manchegos, pero hay que destacar que durante el año y medio que se aplicó esta política el resultado que se consiguió fue completamente contrario, pues las propias fuentes de la Consejería estiman que la lista de espera en cirugía aumentó en 8.322 personas. Pasó de tener en mayo de 2011 un número de 24580 personas a tener casi 33.000 en mayo de 2015.

Además, el sistema de derivaciones causó también un gran número de críticas y casos impactantes que demostraron la enorme precariedad de las clínicas privadas de Madrid. Uno de los casos más llamativos fue el de decenas de niños mal operados en la clínica de La Milagrosa y que ahora están siendo intervenidos de nuevo.

En este sentido, los resultados de dichas derivaciones, calificados por el consejero de Sanidad, Jesús Fernández, como “nefastos”, han supuesto un coste para los ciudadanos de unos quince millones de euros.

Sobre este asunto el consejero también ha asegurado que el Gobierno de Castilla-La Mancha no volverá a derivar pacientes a hospitales privados y piensa que las intervenciones deben realizarse en la región.

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