Condenan al dueño y al portero de una discoteca que prohibió la entrada a dos jóvenes por ser negros

La justicia ha dado la razón a dos jóvenes senegaleses a quienes se les negó la entrada en una discoteca de Albacete por ser de raza negra.

Los hechos se remontan al 4 de junio de 2011, cuando en un bar de “la zona” de Albacete, denominado ‘El Portón’, el portero negó la entrada a Soly Ibrahima Diebate y Salif Sy, dos jóvenes de nacionalidad senegalesa y vecinos de la ciudad, con el pretexto de que, literalmente, “mi jefe es racista y no quiere que entren negros”.La sentencia, dada a conocer ayer por la plataforma 'Albacete por la inclusión' en un comunicado, después de que fuera notificada la pasada semana, refleja que la condena es por vulneración de los derechos fundamentales y contra las libertades públicas.

Cinco testigos, pudieron comprobar en primera persona lo que estaba ocurriendo y decidieron apoyar a los dos chicos requiriendo, tanto al portero como al dueño, las hojas de reclamaciones, pero les fueron denegadas en varias ocasiones, una de ellas, delante de dos policías locales que acudieron al lugar. Finalmente, decidieron denunciar en la Comisaría de la Policía Nacional de Albacete.

Tras celebrarse el pasado mes de junio el juicio de carácter penal contra este acto "discriminatorio y racista", el Juzgado de Instrucción nº 3 de Albacete, ha dictado sentencia a favor de estos dos jóvenes, Soly Ibrahima Diebate y Salif Sy. Por medio de la misma, el tribunal considera que “el delito queda probado” y que se han vulnerado “los derechos fundamentales y contra las libertades públicas del art. 512 del Código Penal” de estas dos personas.

Quince meses de inhabilitación y multa de 1.200 euros

Literalmente, el escrito afirma que “apreciando en conciencia la prueba practicada en el acto del Juicio Oral, expresa y terminantemente se declara probado que sobre las 01:15 horas del día 4 de junio de 2011 el acusado (J. J.G.L.), mayor de edad y sin antecedentes penales, portero del establecimiento de ocio “El Portón” sito en la calle Caldereros de Albacete, se encontraba prestando sus servicios en la puerta del citado local cuando se personaron en el mismo un grupo de varias personas, entre las que se encontraban dos varones de nacionalidad senegalesa, Soly Ibrahima Diabate y Salif Sy que iban en compañía de varias amigas, todas de nacionalidad española, permitiendo el portero el acceso a las mismas pero no a Soly y Salif, a quienes del denegó el acceso diciéndoles que su jefe es racista y no le gustan los negros. La prohibición de acceso a dicho local de las personas de raza negra fue conocida y consentida por el dueño del referido local y también acusado M.C.A., mayor de edad y sin antecedentes penales, quién además se negó a entregar a Soly y Salif la hoja de reclamaciones que le fue solicitada, requiriendo la presencia de la Policía Local”.

Por lo que el juzgado ha condenado, tanto al portero como al dueño de ‘El Portón’, a la pena de quince meses de inhabilitación especial para el ejercicio de ambas profesiones, así como a pagar una indemnización de 1.200 euros a los afectados. Indemnización que será donada, en parte, a asociaciones que trabajen por la causa de los refugiados y refugiadas, tal y como informan los jóvenes.  

Se crearán precedentes jurídicos 

Desde La Plataforma “Albacete por la Inclusión”, que han apoyado en todo momento a Soly Ibrahima Diabate y Salif Sy, han aprovechado para manifestar su satisfacción con la sentencia y, sobre todo, por haber conseguido que “por primera vez en Albacete y gracias a la abogada Donelia Roldan Martínez, desde el juzgado dejen de tratarse estas situaciones como otros delitos leves y pasen a cobrar mayor importancia y a ser consideradas como delito contra los derechos fundamentales por motivo de raza”. 

“Somos conscientes de que no se puede avanzar hacia una convivencia real partiendo de situaciones que generan desigualdad en el ejercicio de los derechos y frenan la participación de todas las personas en la vida normalizada de una comunidad”, aseveran desde la plataforma y añaden que “no podemos tolerar que todavía haya locales nocturnos en nuestra ciudad que impiden el acceso a personas por motivos discriminatorios y racistas”. 

Por último, “Albacete por la Inclusión” agradece a las personas que denunciaron estos hechos hace cinco años, porque “se crearán nuevos precedentes jurídicos que marcarán claramente un paso más hacia la igualdad y la convivencia de todos las y los vecinos en Albacete”, y añade que “toda la sociedad debe actuar y no tolerar estos actos xenófobos y racistas” y anima a las personas a que “no se callen y digan públicamente los nombres de los locales en donde discriminan”. 

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