Guerra abierta en el Consejo Regional de Cámaras con la nueva ley sobre la mesa 

El órgano cameral toledano denuncia una presunta "irregularidad" por parte del presidente del Consejo Regional, Félix Aceñero, y pide el amparo de la Junta ante la situación de "indefensión" en que se encuentra. 

Nuevo choque de trenes en el seno del Consejo Regional de Cámaras con la nueva Ley regional de Cámaras por medio. Un texto que se encuentra en periodo de alegaciones, las cuales han sido precisamente el detonante de este nuevo enfrentamiento entre la Cámara de Comercio de Toledo, que preside Mª Ángeles Martínez, y el órgano cameral de la región. 

La gota que ha colmado el vaso ha sido la presentación de unas alegaciones a la nueva ley de Cámaras sin contar con el apoyo de tres de ellas, lo cual exige el propio reglamento del Consejo en lo relativo a la toma de decisiones. 

Para la Cámara toledana se trata de una "presunta irregularidad", lo cual ha motivado que su Comité Ejecutivo haya aprobado por unanimidad diversos acuerdos, entre los que se encuentra la petición de dimisión del presidente del Consejo Regional, Félix Aceñero. 

Desde la Cámara toledana destacan la actitud "dialogante y correcta en las formas" que siempre ha mantenido este órgano con el Consejo Regional, así como su "lealtad" y disposición a colaborar en la defensa de los intereses del Consejo y los propios. 

Sin embargo consideran que el Consejo Regional no puede sostener "ni ahora ni antes" que las alegaciones presentadas al Ejecutivo castellano-manchego cuenten con el apoyo de las Cámaras provinciales, ya que tres de ellas no las han aprobado. 

Recuerdan que ha sido la Cámara de Toledo la que ha tenido que "provocar" la convocatoria de dos reuniones distintas, por una parte el Comité Técnico de las Cámaras de Castilla-La Mancha, formado por los secretarios generales de todas ellas, y por otra el Pleno del Consejo, para debatir las alegaciones a ambos proyectos normativos. Si no hubieran forzado estas reuniones, explican, la actitud que habría adoptado el Consejo hubiera sido bien "dejar pasar la oportunidad de alegar", o lo que consideran peor, "habría hecho lo de siempre, redactarlas y presentarlas sin haberlas debatido y acordado" como procede.  

Sin embargo, ni estas reuniones han impedido que, según la Cámara de Toledo, se hayan presentado unas alegaciones firmadas por el presidente del Consejo "sin contar con el apoyo necesario de tres cámaras". 

Una "irregularidad" que se une a la situación de "indefensión" del órgano cameral toledano, que llevaba a su Comité Ejecutivo a reunirse este jueves de forma extraordinaria para abordar la situación y las medidas a adoptar. De este modo, por unanimidad de sus miembros, tomaban la decisión de no volver a comparecer en los plenos convocados por el Consejo Regional, así como de redactar y trasladar a dicho órgano, con copia a la consejera de Economía, un documento en el que se recoja lo sucedido en el último pleno, celebrado el 11 de mayo, y el proceder del Consejo en relación a lo que allí se decidió. Un escrito en el que además dejar constancia de que la Cámara de Comercio de Toledo "no se siente representada" por dicho órgano regional, el cual "no podrá actuar en representación" de la Cámara toledana en ningún foro en el que se solicite la participación de las Cámaras de la región. 

Por otra parte, solicitan por escrito el amparo de la Administración tutelar, e incluso de la propia consejera, ante la presunta irregularidad cometida por el presidente del Consejo Regional, al presentar unas alegaciones sin contar con la aprobación de la mayoría necesaria. Algo por lo que también, finalmente, piden la dimisión del presidente de este órgano. 

Desde hace meses 

Cabe recordar que este crisis ya manifestaba externamente sus signos el pasado verano, cuando a finales del mes de julio la Cámara de Comercio de Toledo, criticara la intención manifestada por el presidente del Consejo, Félix Aceñero -titular de la Cámara conquense-, de presentar sus propias alegaciones ante la falta de acuerdo en el seno del Consejo. 

Un documento que, sin embargo, firmaba como presidente del Consejo Regional de Cámaras y en papel timbrado de dicho órgano. Texto que sirvió como base para el actual borrador de ley de Cámaras regional. Entonces, desde la Cámara de Comercio de Toledo se prefirió dejar pasar el asunto, evitando así una crisis institucional, pero se puso en conocimiento de la Junta de Comunidades la actuación irregular del presidente. 

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