TOLEDO.- Castilla-La Mancha ya tiene ley de Mecenazgo Cultural tras su aprobación el pasado jueves por el Parlamento autonómico, en el cual finalmente no ha sido posible alcanzar el consenso deseado. Una proposición de ley que ha salido adelante gracias a la mayoría absoluta de Emiliano García-Page, al abstenerse en la votación el Partido Popular y votar en contra los cuatro diputados de Ciudadanos.
Normativa autonómica impulsada por el grupo parlamentario socialista con la que se ha recuperado el proyecto de ley que sobre esta misma cuestión se realizó la pasada legislatura, y que no logró llegar al pleno después de que Podemos se ausentara de la votación en la Comisión de Cultura en la que se tramitaba.
En este sentido cabe recordar cómo fue la entonces vicepresidenta primera de las Cortes y secretaria regional de Organización de la formación morada, María Díaz, quien como medida de protesta al no haber sido tenidas en consideración las enmiendas de su grupo por parte de sus socios en el Gobierno autonómico, decidió abandonar la sala de comisiones antes de la votación. De este modo, los votos en contra de los diputados del PP hicieron que el proyecto de ley fuera rechazado.
Sin embargo ahora, a pesar de no haber sido aceptada ninguna de las enmiendas parciales que PP y Ciudadanos habían mantenido vivas para su debate en el pleno, los socialistas han conseguido sacarla adelante con su mayoría.
Una nueva ley que para la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, supone "un hito legislativo", puesto que "da más protagonismo a la cultura, a los gestores y a la ciudadanía".
Una ley que "contiene solo beneficios", tanto para la cultura como para la sociedad castellanomanchega en general, y en la que se recogen dos "virtudes políticas", por una parte "la solidaridad" y por otra "la responsabilidad".
En este sentido, la consejera ha explicado que esta ley es solidaria porque promueve la creación de sinergias que permitan "multiplicar los resultados culturales" y canaliza el arte de los creadores hacia quienes quieren poner sus recursos materiales al servicio de la creación.
Junto a ello es responsable porque busca acciones que faciliten que la cultura "llegue a todos", así como que todos puedan participar en la forma que mejor se ajuste a sus posibilidades.
Así, esta nueva ley tiene como finalidad fomentar el mecenazgo cultural realizado por personas físicas o jurídicas en Castilla-La Mancha, la regulación de los incentivos fiscales aplicables al mismo y la consecución de una mayor colaboración de la sociedad civil con la actividad cultural.
Del mismo modo la ley recoge la creación de un Plan de Mecenazgo Cultural de Castilla-La Mancha, que deberá ser aprobado por el Consejo Regional de Mecenazgo Cultural ‑que será creado al efecto‑, y será ejecutado por la Oficina de Mecenazgo Cultural, también nueva, y que ha sido una de las cuestiones que ha llevado a la formación naranja a votar en contra de la proposición.
Al margen de esto, la nueva norma establece que el mecenazgo cultural se podrá realizar a través de donaciones, cesiones de uso de bienes incluidos en el catálogo del patrimonio cultural de Castilla-La Mancha, obras de arte de calidad garantizada o inmuebles para realizar actividades culturales, y convenios especiales de colaboración.
Un texto que llegaba al pleno con diecisiete enmiendas parciales vivas, seis por parte del Partido Popular y otras once de Ciudadanos, siendo todas ellas rechazadas.
Desde ambos grupos se proponía la ampliación de los ámbitos para aplicar el mecenazgo. Mientras los ‘populares’ pretendían que se incluyesen la cerámica y la artesanía, desde la formación naranja se pedía lo mismo para el deporte y la investigación. Planteamiento que, según ha defendido la diputada socialista Manuela Casado, "desvirtuarían la ley".
Al margen de esto, desde el PP se pedía también que el texto recogiera la figura de los micromecenazgos y la importancia de la restauración del patrimonio.
El diputado ‘popular’ Benjamín Prieto defendía que sus enmiendas únicamente pretendían mejorar el texto y subrayaba que se tenía la oportunidad de "comenzar juntos" una importante tarea de sensibilización y concienciación en la sociedad para fomentar el mecenazgo, aunque alertaba de que esta fórmula no debe suponer una reducción de los fondos destinados a la cultura por parte de la Administración regional.
Por su parte, desde Ciudadanos su portavoz, Carmen Picazo, aseguraba que votar en contra de esta ley no es estar contra la cultura, puesto que su grupo la apoya "contundentemente", aunque no vea bien esta norma al no ser suficientemente ambiciosa.
En cambio, la diputada del PSOE y defensora del dictamen de la ley, Manuela Casado, se mostraba convencida de que esta ley "es muy necesaria", porque servirá para proteger la cultura, sector desde el que se la demanda "cada día más".
