TOLEDO.- Los hechos de septiembre y octubre de 2016 han seguido marcando profundamente al Partido Socialista. Fue uno de los momentos más dolorosos para la militancia del partido, que acabó con la dimisión a marchas forzadas de Pedro Sánchez y la posterior abstención de sus diputados ‑excepto algunos díscolos‑ en la investidura del que fue el último Gobierno de Mariano Rajoy.
El debate se creía superado, pero Susana Díaz lo ha vuelto a poner en boca de la actualidad política tras entonar el ‘mea culpa’. La andaluza sostuvo en una intervención parlamentaria que "se equivocó" al permitir que el PP se volviera a hacer con el Ejecutivo central, y que su antiguo rival en las primarias socialistas "acertó"; debido a que los conservadores no actuaron con reciprocidad, votando en dos ocasiones contra la investidura del actual presidente.
Unas declaraciones por las que ha acabado siendo preguntado el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Durante una entrevista este miércoles en la Cadena COPE, el socialista Emiliano García-Page ha asegurado que Díaz, compañera de filas a la que ha definido como una "amiga", realmente "quería decir otra cosa". El jefe del Gobierno autonómico considera que lo que quería trasladar la andaluza es que, después de la repetición electoral, su partido hizo "un acto de responsabilidad" al país, confiando en que los ‘populares’ se comportasen "con el mismo nivel de responsabilidad institucional".
Tras corregir a la actual líder de la oposición en Andalucía, García-Page ha declarado que "la cuestión no está en si Pedro Sánchez acertó entonces", puesto que de ser así "hoy estaría equivocado", teniendo en cuenta que fue el propio presidente quien ha acabado pidiendo la abstención de los 'populares' para ser investido. El secretario general del PSOE castellanomanchego ha reconocido que la abstención "llevó a desgarros internos"; pero ha recordado que, en el momento que fueron los socialistas los que necesitaron la abstención, el partido pasó a verla de forma "positiva".
Seguidamente, el presidente de la región ha apostillado que "si hoy" se le veía utilidad a una hipotética abstención del PP para desbloquear la situación política es porque "en su momento lo hicimos bien". Un acto que considera de "mayor generosidad", al estar entonces en la oposición, que hacerlo ahora desde el Gobierno.
Para finalizar sobre el tema, García-Page ha acabado alabando la figura de la abstención técnica, describiéndola como "una jugada que impide fundamentalmente que los independentistas se salgan con la suya". "Otro gallo cantaría de haberse comportado el Partido Popular como lo hicimos algunos en su momento", ha concluido el presidente en su conversación con Carlos Herrera.
"SIGO DICIENDO LO MISMO"
En la entrevista, el presidente también ha hablado de las críticas que recibió sobre su postura contraria a la modificación del Código Penal, en concreto para suavizar los delitos de sedición y rebelión. García-Page ha señalado que, entre sus responsabilidades como español y dirigente de un partido que gobierna España, se encuentra la de hablar "de un delito contra el orden constitucional".
Así pues, el barón socialista ha reivindicado que las comunidades autónomas son parte fundamental de España. Por ello, ha sostenido que como presidente autonómico debe "garantizar que los 2 millones de castellano-manchegos, cuando llegue el momento de hablar de España", puedan hablar "y en las mismas condiciones" que el resto.
Sobre las palabras de Cristina Narbona, que defendía que la "iniciativa legislativa" sobre la reforma del Código Penal corresponde al Congreso de los Diputados; Page ha respondido recordando que las comunidades autónomas tienen capacidad para "plantear al parlamento español una iniciativa legislativa para cambiar esto o aquello de cualquier legislación del Estado".
"Solo faltaría que a estas alturas que el señor Torra pueda decir lo que le dé la gana y sin embargo en el PSOE quieran imponer una ley del silencio, que no veo que sea así", ha lamentado García-Page, quien considera que "en el fondo" él sigue diciendo "las mismas cosas de hace dos meses que nos dijeron que había que decir para pedir el voto a la gente" y ha añadido: "Estamos en el mismo argumentario".
