CIUDAD REAL.- La revuelta de la España rural se ha hecho notar una vez más en el conjunto de la comunidad autónoma. Los trabajadores del campo han protagonizado una serie de movilizaciones coordinadas que han marcado el inicio de la semana, cortando carreteras y bloqueando las principales avenidas de algunas ciudades de Castilla-La Mancha.
A la mañana del lunes, se ponía en marcha el primer paro organizado en la provincia de Ciudad Real, secundado por el conjunto de las organizaciones agrarias: ASAJA, COAG y la UPA. Unas seis mil personas colapsaron las vías de comunicación que conectan Madrid con Andalucía y Extremadura con el Levante.
En Manzanares, los manifestantes llegaron a bloquear tanto la A-4 a la altura del kilómetro 171 como la A-43. Este último corte no estaba autorizado en un principio por las autoridades, lo que ha llevado a momentos de tensión entre los agricultores y la Guardia Civil. Según cifras de los sindicatos agrarios, unos mil quinientos agricultores, así como trescientos tractores, habrían pasado por las dos autovías. Sobre las once horas, y a veintiséis kilómetros del primer corte, se repetía la misma acción en la A-4, dentro del término municipal de Valdepeñas.
Uno de los éxitos radica en la unión de las organizaciones agrarias, que agradecen el respaldo de la sociedad y de los agricultores y ganaderos presentes en los actos del primer paro agrario generalizado en la provincia de Ciudad Real, dentro del calendario #AgricultoresAlLímite. pic.twitter.com/ZQQGQjIQbx
— ASAJA Ciudad Real (@asajacr) March 9, 2020
Al mismo tiempo, y en la ciudad de Tomelloso, cerca de unos quinientos tractores procedentes de distintas zonas de la comarca, salieron de la calle Oriente hacia los kilómetros 121 y 123 de la Autovía de los Viñedos, llegando a cortar además el tramo de la A-43. En la intervención han estado presentes tanto el presidente de ASAJA en Castilla-La Mancha, Fernando Villena, como el secretario general de UPA Ciudad Real, Pascual Ortiz.
Hoy son los compañeros de Ciudad Real quienes salen a la carretera en defensa de #AgricultoresAlLímite de toda España. Seguimos unidos, seguimos en pie. pic.twitter.com/7CaG2gXZq3
— UPA (@UPA_Federal) March 9, 2020
Las autovías no han sido las únicas vías que han sufrido los contratiempos de las concentraciones del sector primario. En Socuéllamos, unas 250 personas han ocupados las vías de la estación de ferrocarril, impidiendo el paso de los trenes hasta las trece horas de la tarde.
️ La ocupación de las vías del ferrocarril de #Socuéllamos en cifras: Hasta las⏰13:30 horas han ocupado las vías más de 2⃣5⃣0⃣ personas , acompañadas de numerosos tractores en las inmediaciones de la Estación. #AgricultoresAlLimite. pic.twitter.com/tjIg5I1F0J
— ASAJA Ciudad Real (@asajacr) March 9, 2020
DOSCIENTOS TRACTORES POR LAS CALLES DE CUENCA
Tras el éxito de la convocatoria en Ciudad Real, los sindicatos agrarios realizaron el martes una tractorada en la ciudad de Cuenca, a la que se sumaron doscientos tractores y una multitud de agricultores a pie. La manifestación recorrió las principales arterias de la capital provincial, pasando por la Avenida República Argentina, las calles Fermín Caballero y Hermanos Becerril, hasta llegar a la Plaza de Villaluz.
Gran tractorada en el centro de Cuenca. Cientos de tractores demandan #preciosjustos. @coagclm @upaclm @asajaclm #agricultoresallímite pic.twitter.com/ZcbxTF2QsP
— Coord .agraria CLM (@coagclm) March 10, 2020
PRECIOS JUSTOS PARA MANTENER SUS EXPLOTACIONES
Son varias las causas que han llevado a trabajadores y empresarios del sector primario a levantar su voz contra el Gobierno central, radicalizando sus formas en las últimas semanas. La principal pasa por la diferencia entre los precios percibidos por los agricultores y ganaderos frente a los beneficios de la grandes cadenas de distribución.
Los agricultores consideran insuficientes para mantener sus explotaciones las acciones tomadas por el Gobierno de España desde el pasado mes de febrero, en las que reforzaban, mediante un paquete de medidas, los mecanismos de control sobre los costes asociados a los productos alimenticios, además de introducirse nuevas exigencias a las promociones de los supermercados.
A la problemática de los precios se unen los aranceles impuestos por el Gobierno de los Estados Unidos a los productos del cerdo, la oliva, el queso y el vino; así como las sanciones económicas establecidas a partir de 2014 entre Rusia y la Unión Europea. Unas medidas que han minado las exportaciones del sector agroalimentario.
Otro de los retos a los que se enfrentan es la reforma de la Política Agraria Común, que se está abordando en el seno de los gobiernos europeos, y en la que algunos estados buscan una reducción del Presupuesto. Los trabajadores del campo no solo reclaman el mantenimiento las partidas suficientes para mantener su modo de vida. También esperan que a partir de ahora se haga una redistribución más justa, que ayude a mitigar el problema de la despoblación.
