TOLEDO.- Airbus defiende la continuidad de su actividad industrial en España, aunque reconoce que tiene empleados contagiados de coronavirus, tal y como señalan los sindicatos, que han pedido el cierre de las plantas en todo el territorio nacional e incluso la Confederación General del Trabajo (CGT) ha convocado una huelga indefinida, a partir del próximo 30 de marzo, contra las medidas empresariales del grupo durante la crisis del coronavirus.
La multinacional europea dedicada a la fabricación de aeronaves, que cuenta con una factoría en la localidad toledana de Illescas, ha confirmado este miércoles que tiene numerosos de sus empleados afectados por Covid-19, entre los que han resultado positivos y otros que son sospechosos o están en cuarentena propia.
La compañía, que asegura tener "un protocolo claro con respecto a las personas que podrían estar infectadas", ha comunicado a las autoridades su estimación de números sobre infectados, pero "la situación es muy dinámica y cambia rápidamente", ha matizado.
Airbus ha explicado que está monitoreando la situación de cerca y está en contacto continuo con las personas a través de sus equipos, para "brindar todo el apoyo posible".
Para el grupo aeroespacial, la salud y seguridad de los empleados es su "máxima prioridad" y está enfocado en la implementación de estrictas medidas requeridas en todos sus centros de trabajo y oficinas, de acuerdo con los protocolos nacionales y de la propia compañía para proteger a su gente y limitar la propagación del virus.
El grupo añade que ha llevado a cabo "una extensa labor" en coordinación con sus interlocutores sociales, para garantizar la salud y la seguridad de sus empleados, garantizando a la vez la continuidad de la actividad.
La implementación de estas medidas exigió una suspensión temporal de las actividades de producción y montaje en las plantas de Francia y de España durante cuatro días ‑del 16 al 20 de marzo‑, ha recordado Airbus.
El fabricante ha insistido en que los centros de trabajo sólo reabren si cumplen con las nuevas medidas de salud y seguridad en cuestión de higiene, limpieza y distanciamiento, mejorando al mismo tiempo la eficiencia de las operaciones en las nuevas condiciones de trabajo.
Antes de la reapertura de sus plantas esta semana, el pasado viernes, tras visitas físicas y virtuales a los centros de Getafe, Barajas e Illescas, la Inspección de Trabajo en España envió notificación, donde "no observa ninguna situación de riesgo grave e inminente y tampoco se cumplen los requisitos legales para paralizar la actividad industrial", según la versión de la multinacional.
Respecto a los datos concretos, el fabricante aeronáutico ha confirmado al comité de empresa 138 casos positivos en coronavirus entre sus empleados de los centros de trabajo en España, mientras que 820 trabajadores se encuentran en cuarentena por presentar síntomas, como son 147 de ellos, o por haber estado en contacto con algún familiar o compañero con la enfermedad o haber visitado zonas de riesgo, como es el caso de los 673 trabajadores restantes.
"ATENTADO CONTRA LA SALUD PÚBLICA"
Cabe recordar también que este miércoles la Unión General de Trabajadores (UGT) exigía la suspensión inmediata de la actividad de Airbus, a excepción de las esenciales, y el cierre de las plantas.
Según Miguel Ángel Regidor, responsable de este sindicato en la planta de Illescas, tras el abandono de la fábrica por parte de los trabajadores el pasado día 16 y la suspensión de la actividad durante 4 días, Airbus ha adoptado medidas de higiene y desinfección en los centros, "pero no las suficientes".
"No se está velando por la salud ni la seguridad de los trabajadores y sus familias, las factorías de Illescas, Getafe y Barajas acumulan ya al menos cincuenta personas contagiadas; es un foco de contagio que debemos detener a toda costa", detallaba.
Por otra parte, UGT pidió que Airbus donara urgentemente al sistema sanitario el millar de mascarillas y guantes de los que dispone. "No comprendemos que en una situación de emergencia como la actual Airbus priorice una producción que no es de primera necesidad a salvar vidas, esos equipos de protección los necesita la sanidad y el bien social", sostenía Regidor.
Finalmente, el sindicato calificó la actitud de Airbus como "atentado contra la salud pública", y anunció que recurrirá a los "cauces legales disponibles" para que las administraciones reviertan esta situación.
