TOLEDO.- El Parlamento regional ha aprobado este jueves 11 de las 21 propuestas de resolución al Debate del Estado de la Región, de las cuales tan solo dos han conseguido el respaldo de todo el arco parlamentario.
Unanimidad de los tres grupos parlamentarios para dos propuestas de Ciudadanos en las que se reclama la necesidad de rebajar la tensión política para alcanzar acuerdos en materia de fondos europeos, ley 'antiokupación' y la ley contra la despoblación; así como favorecer el envejecimiento activo y saludable, la autonomía de las personas mayores y/o con discapacidad y promover una asistencia sociosanitaria adecuada para este colectivo.
Junto a estas dos propuestas de Ciudadanos han sido aprobadas otras dos de la formación naranja, así como las siete planteadas por el grupo socialista, mientras que las siete del Partido Popular han sido rechazadas, a pesar del apoyo recibido por los cuatro diputados de Cs.
Y es que los diputados de la formación que lidera Carmen Picazo en Castilla-La Mancha han demostrado su apuesta por el consenso para lograr que la región pueda salir de la crisis generada por la pandemia de COVID-19, votando a favor de 20 de las 21 propuestas planteadas por los tres grupos.
Por su parte los socialistas, además de votar a favor de las siete propias, ha apoyado también cuatro de las seis que presentaba Ciudadanos, tras introducir algunas modificaciones en tres de ellas, mientras que ha rechazado todas las del Partido Popular.
Los populares se han abstenido solo en una de las propuestas de resolución socialistas, votando en contra de las seis restantes, y en lo que respecta a las planteadas por la formación naranja ha apoyado solo algunas de ellas.
De este modo las Cortes castellanomanchegas han dado su respaldo a los planteamientos realizados este miércoles por el presidente regional, Emiliano García-Page, durante la primera jornada del Debate, los cuales quedaban recogidos en las propuestas planteadas por el grupo socialista. La petición al Estado de la armonización fiscal entre comunidades autónomas, el aumento del empleo público para ofrecer una mayor calidad en los servicios y la mejora de la Sanidad, han quedado así refrendadas en una votación que ha seguido a un último turno de palabra por cada grupo en el que ha habido desde peticiones al consenso a reproches, algún insulto e incluso una loa nada improvisada.
De ella ha sido protagonista la portavoz del grupo popular, Lola Merino, quien no ha dudado en dedicar los últimos minutos de su intervención a alabar a su jefe de filas y vecino de bancada, Paco Núñez.
De él ha valorado "su capacidad de trabajo y vocación por servir a nuestra tierra y a nuestros paisanos", le ha dicho que "es una suerte" trabajar con él y le ha augurado que "el odio" que le procesan Page y el PSOE "debe ser la fuerza que te guíe". Un mensaje de apoyo a su líder que ha cerrado con un "gracias Paco".
Al margen de halagos a su jefe, para Merino con su discurso García-Page "demostró que no tiene proyecto ni de presente ni de futuro para esta región".
La portavoz popular ha criticado "las formas, la actitud y las palabras" del presidente regional, calificándolas como más propias "de una situación informal en la barra de un bar o de una conversación con un amiguete".
Para Merino el presidente autonómico "defraudó", con un discurso aburrido, "un refrito de frases hechas y chistes sin gracia", ha señalado, que mostró -según ella- "al Page soberbio y faltón".
Y es que para la popular se echó en falta "el reconocimiento y agradecimiento" a todos los que han estado en primera fila en esta pandemia, y a los que además -según Merino- el presidente regional "volvió a insultar una vez más".
Frente a ello la portavoz del PP ha considerado que tuvo que ser Núñez quien pusiera sobre la mesa "un plan de salvamento" para la región, el cual Page "ignoró".
Algo que según Merino responde a la "inquina, ojeriza, odio al PP y a nuestro presidente" que tiene, y que sin embargo -ha dicho- "será nuestra fuerza".
Tras ese repaso al discurso de García-Page ha vuelto a insistir en hacerle responsable de que Castilla-La Mancha sea la comunidad autónoma "con más fallecidos por 100.000 habitantes de toda España", de no tener "alma ni humanidad" y de ser "máquinas de generar ruina, pobreza, dolor y crisis".
Se ha referido así a un gobierno "sobrepasado por la realidad, instalado en la soberbia y que desprecia cualquier tipo de ayuda".
En este sentido ha acusado a García-Page y al PSOE de haber aprovechado el estado de alarma "para cerrar el Parlamento", desde el cual ahora quiere dirigir "solo en su mayoría absoluta, emborrachado de poder".
Asimismo ha criticado que no esté escuchando a la sociedad civil y ha calificado a su partido como "la voz de todos los castellanomanchegos", algo que posteriormente ha rechazado por completo el presidente del grupo socialista, Fernando Mora, durante su turno de palabra.
Pero antes de terminar su intervención, la portavoz del PP ha vuelto a recurrir a uno de los mantras de los populares, asegurando que a la complicada situación actual, al dolor de los fallecidos y la crisis económica, se suma "la desazón que genera un gobierno que está protegiendo a filoetarras bolivarianos independentistas".
"¿VE A PAGE CON BOINA Y METRALLETA?"
Un comentario que también ha tenido respuesta por parte del presidente del grupo socialista, Fernando Mora, quien no solo ha criticado que durante su intervención para defender una propuesta de resolución la diputada popular Gema Guerrero haya planteado que "los socialistas quieren derrocar a la monarquía", sino que también ha preguntado a Merino por las "barbaridades" que dice.
Al tiempo le ha preguntado si realmente "ve a Page con boina y metralleta" y lo ha considerado "absurdo". Planteamientos, ha dicho Mora, con los que "se desacreditan ustedes mismos".
Una intervención la del presidente del grupo socialista que comenzaba reprochando al PP la ausencia de propuestas en el discurso de Núñez de este miércoles, aunque "insultos todos".
Y es que después de escuchar a Merino para Mora queda claro "por qué Vox no está en la Cámara", puesto que los populares son "unos auténticos radicales".
Una forma de política con la que ha dicho sentirse "muy dolido", contexto en el que también ha reprochado que desde el PP nuevamente se dedicaran ayer a desacreditarle en lo personal. Por ello les ha pedido que "si esas son sus formas de hacer política, váyanse a su casa".
Pero también Mora se ha fijado en los halagos de Merino a Núñez, de quien ha dicho "le encanta que le adoren". Al presidente de los populares se ha referido como "un riesgo permanente" y le ha dicho que es "más actor que político".
Asimismo ha criticado la "radicalidad" de quienes dirigen el grupo popular, que lleva "por el mal camino a todos". Un contexto en el que ha preguntado a Núñez si va a decir a sus diputados de Castilla-La Mancha "que voten a Abascal en la moción de censura".
Por otra parte ha justificado el voto en contra del PSOE a todas las propuestas del PP porque "todo es mentira", ya que -ha dicho- si ellos gobernaran "no votaría ni aprobarían ninguna".
Por último, Fernando Mora ha recordado a Núñez que "no hay elecciones hasta dentro de 3 años" y le ha pedido que "trate de apoyar" para salvar a Castilla-La Mancha. "Las cosas están mal, pero pueden estar peor", ha advertido el socialista, quien sin embargo se ha mostrado convencido de que esta región "va a salir adelante".
Para terminar ha pedido a los populares que cambien "el tono, la estrategia", que no se radicalicen "ni compita con la extrema derecha", al tiempo que ha subrayado que "con insultos no se llega a ningún sitio".
CS PIDE UNA TREGUA POLÍTICA
Todo ello tan solo minutos después de que desde la misma tribuna de oradores la portavoz del grupo parlamentario y coordinadora de Cs en Castilla-La Mancha pidiera a PP y PSOE "una tregua política", "enterrar el hacha de guerra" por un tiempo, para poder ofrecer soluciones de consenso a esta crisis.
Y es que para Carmen Picazo es "ahora o nunca", puesto que ante esta crisis sin precedentes son solo dos las opciones: "comportarnos como siempre", cayendo "en el partidismo, las zancadillas, el ventajismo y la política de vuelo corto", o bien "comportarnos como nunca, estar a la altura de las circunstancias, pasar de las palabras a los hechos, a un terreno nuevo de la cesión, de intercambio de ideas, confianza y buena fe". En definitiva, ha continuado, apostar por "un pacto sincero" y pasarse a la política "útil".
Un contexto en el que ha recordado que pactar significa tener que ceder, "renunciar a ciertas cosas", como ha demostrado Cs que se puede hacer, aunque "no a lo fundamental".
Para concluir, Picazo hacía un nuevo llamamiento a la "responsabilidad" de modo que "confiemos en nosotros mismos, para que la sociedad confíe en nosotros".
