Mata a un gato centrifugándolo en la lavadora y tras ser condenada a prisión el juez suspende la pena

  • Esta vecina de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) no llegará a ingresar en prisión después de que el juez haya suspendido dos años la condena, con la condición de que en ese plazo no delinca ni sea condenada por ello.

CIUDAD REAL.- Seis meses de prisión es la condena que se ha impuesto a una joven, vecina de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real), por haber sometido a un gato a varios ciclos de lavadora hasta matarlo, ”actuando con claro desprecio hacia la integridad del animal”.

Así lo recoge la sentencia a la que ha tenido acceso PeriódicoCLM, en la que se considera como hechos probados que la acusada, en febrero de 2018, cuando tenía 19 años, ”introdujo en la lavadora” de su domicilio a un gato que se había metido en la vivienda, ”con la única intención de deshacerse” del animal, ”ya que molestaba a su gata”.

Tras introducirlo en la lavadora, la puso en funcionamiento, realizando ”al menos dos ciclos de lavado”, ocasionando la muerte al gato.

Hechos que la acusada grabó y difundió a través de la red social Instagram a través de su cuenta, así como fotografías con expresiones como ”el gato que está sedado ha muerto... si... el gato de la mala suerte”, ”gato lavadora esto es lo que pasa a los gatitos que intentan tirarse a mi pobre gatita”, ”el segundo lavado...ha resucitado”.

Un vídeo en el que se podía escuchar al gato asustado y maullando lastimeramente, ya dentro del tambor, agonizando mientras era grabado.

Desde la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA), desde la que ahora se ha hecho pública esta sentencia dictada en julio de 2020, denuncian que ”no hubo piedad”, puesto que el animal ”fue sometido a un primer ciclo de lavado, y luego a otro ciclo más, como mínimo”, puesto que al concluir el primer ciclo los agónicos maullidos del animal demostraban que aún seguía vivo.

Asimismo recuerdan cómo en el vídeo se oye a la condenada decir que pondrá más jabón e iniciará otro ciclo de lavado porque ”el gato no se había lavado bien”.

”No hubo compasión”, subrayan, al tiempo que destacan cómo ”las escenas finales del horrendo vídeo muestran las últimas sacudidas de un tierno cuerpo negro que, sin poder más, entregó su vida”.

A pesar de todo, la joven no ingresará en prisión por haber sido condenada ”sólo a seis meses”, subrayan, y al haberle aplicado el juez la suspensión de la pena, entre otras cosas, ”por las características del hecho”. Junto a ello también se tienen en cuenta ”las circunstancias personales de la condenada”, el hecho de que no posea antecedentes penales, así como la duración de la pena impuesta.  

URGE MODIFICAR EL CÓDIGO PENAL

Desde el colectivo animalista aceptan y respetan la sentencia, pero ponen el acento crítico en la redacción del Código Penal, el cual consideran que precisa una modificación ”urgente”.

En este sentido ANPBA se pregunta si ”acaso las circunstancias propias del acto cometido no son suficientemente graves” y si ”no es horrendo que alguien someta a un animal a un sufrimiento tan intenso y despiadado, dando vueltas y vueltas en el tambor de una lavadora, hasta matarlo”.

Así, consideran incuestionable que la sociedad española está cada día más sensibilizada contra el sufrimiento animal, mostrando una opinión crítica ante sentencias ”incomprensibles”.

Recuerdan que en España son ”constantes” los malos tratos a animales, se ahoga a perros en ríos o en pantanos atados por las cuatro patas y el hocico, o con pesados bloques de hormigón atados al cuello; burros apaleados que mueren de hambre y sed; gatos tiroteados o ahogados; caballos maltratados hasta morir; cabras sacrificadas en ritos satánicos; gallos obligados a luchar en peleas; fauna silvestre a la que salvajemente ahogan en acequias; ciervos y vacas perseguidos y acuchillados en el campo; así como zorros matados a patadas y con el cuello pisoteado. ”Un pavoroso rosario de animales caen, cada día, víctimas anónimas de la crueldad, la carencia de compasión y del abuso de poder que ejercen sobre ellos ciertos seres humanos”, subrayan.

Una situación ante la que desde ANPBA van a seguir insistiendo ante el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, y ante el Congreso de los Diputados, para urgir a la modificación de un Código Penal ”tan laxo como absurdo”, que contempla una pena máxima de 18 meses de prisión por maltratar a un animal hasta la muerte. 

Consideran que las penas actuales deben elevarse ”sustantivamente”, como exige la sociedad actual, si es que se quiere que el Código Penal ejerza una verdadera función disuasoria.

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