TOLEDO.- Los servicios sanitarios de Castilla-La Mancha obtienen la peor valoración por parte de los ciudadanos en la atención recibida con motivo de la covid-19, considerando solo el 59,3 por ciento de ellos que fue "buena o muy buena", frente a regiones como Asturias, el País Vasco o Aragón, en las que el cien por cien así lo considera.
Mejor valoración obtienen también en Andalucía y Extremadura, donde más del 80 por ciento valora positivamente la atención, así como en la Comunidad de Madrid (78,6 por ciento), Murcia (76,6 por ciento) o Castilla y León (74,3 por ciento).
Dato que se recoge en el informe 2021 presentado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, elaborado a partir de datos de distintos organismos oficiales, como los ministerios de Sanidad y Hacienda, así como los publicados por el CIS o el Barómetro Sanitario.
Un informe en el que se analizan distintos criterios de valoración, sumando al de la opinión de la ciudadanía otros como los relativos a las listas de espera, el funcionamiento de los servicios sanitarios, la privatización o el gasto farmacéutico.
Datos en función de los cuales se va otorgando a cada comunidad autónoma una puntuación, en base a la que se establece una clasificación, en la que Castilla-La Mancha no logra pasar del 'regular' en la valoración de sus servicios sanitarios.
Una clasificación que se encuentra encabezada por el País Vasco, Navarra, Asturias y La Rioja, que según este informe son aquellas comunidades autónomas con mejores servicios sanitarios.
A continuación, junto a Castilla-La Mancha -que ocupa el último puesto entre ellas por puntuación- se encuentran en el grupo de servicios sanitarios regulares Aragón, Castilla y León, Extremadura y Galicia.
Por su parte, entre aquellas cuyos servicios sanitarios son calificados como "deficientes" se sitúan Cantabria, Baleares, Cataluña y Madrid; mientras que las regiones con los peores son Canarias, Valencia, Andalucía y Murcia.
Una clasificación en la que Castilla-La Mancha pierde tres posiciones respecto a años anteriores, siendo la suya la bajada más significativa, según se señala en el informe.
Situación que estaría reflejando el empeoramiento -o no mejora al mismo nivel que el resto de comunidades autónomas- de los servicios sanitarios castellanomanchegos respecto a la última legislatura. Y es que, atendiendo a las tablas recogidas en este informe 2021 -aunque elaborado de forma mayoritaria con datos de 2019, pero también de 2020 y 2021 en algunas variables- desde 2016 se había mantenido en el sexto lugar de la clasificación, mientras que ahora se encuentra en el noveno.
Señala el informe de la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública que comparando las posiciones relativas de las comunidades autónomas entre este informe y el de 2019 (el anterior porque en 2020 no se elaboró debido a la pandemia), se puede evaluar la evolución experimentada desde las últimas elecciones autonómicas.
De este análisis concluyen que mientras que entre las comunidades autónomas gobernadas por el PP, una (Galicia), mejoró su mientras que otras 4 empeoraron. Por su parte entre las gobernadas por el PSOE 5 mejoraron y otras 5 empeoraron -entre estas últimas Castilla-La Mancha-, y entre aquellas con gobiernos nacionalistas ambas han mejorado. De ello, señalan, "parece deducirse que la evolución fue más positiva en las que no tuvieron gobiernos conservadores, aunque sería conveniente esperar hasta el año próximo para poder valorarlo con más tiempo de evolución".
No obstante, para los autores de este informe, resulta "claramente" excesiva la diferencia existente entre comunidades autónomas, de 38 puntos sobre un máximo alcanzado de 98. Y es que la ratio entre la comunidad autónoma de mayor puntuación -País Vasco- y la de menor puntuación -Murcia- es de 1,63, una de las menores registrada entre los informes realizados desde 2014.
Dato que, sin embargo, sigue evidenciando la gran disparidad en los servicios sanitarios entre las comunidades autónomas que, aunque se reduce ligeramente, "continúa poniendo en peligro la necesaria cohesión y equidad entre territorios".
