GUADALAJARA.- Vivir en la 'España vaciada' no es fácil y menos aún cuando servicios tan esenciales como el transporte público fallan. Las deficiencias en la línea de autobús que conecta Madrid con las localidades de Sigüenza, Atienza y Miedes, así como Valdecubo, Romanillos de Atienda o Tordelloso, entre otras, ha llevado a sus vecinos a emprender una campaña de recogida de firmas para reclamar un servicio de calidad.
Son ya más de 1.300 firmas las que ha reunido este movimiento vecinal de la serranía de Guadalajara, que reclama la intervención de las autoridades competentes para garantizar que el servicio se preste con unos mínimos de calidad, frente a la "inacción" de la empresa encargada de la línea.
Se trata en concreto de la línea 034, que recorre más de una veintena de pueblos, los cuales en muchos casos no llegan al centenar de habitantes, pero que ven limitado el servicio, al ofrecerse tan solo una frecuencia de una ruta a la semana, realizando además un trayecto variable, al pasar por los distintos pueblos bajo solicitud telefónica. Una fórmula que los vecinos no verían mal si no fuera porque se vuelve una "tarea imposible" al no coger el teléfono la propia empresa, de forma que se ven "ignorados" y no pueden acceder al transporte público.
Una situación que se ha convertido en el pan de cada día desde 2018, cuando ya comunicaron a la Consejería de Fomento los problemas que se estaban produciendo con el servicio. Desde entonces, aseguran en un comunicado, "han pasado tres años sin que se le ponga solución, con una pandemia por medio", y los vecinos afectados "no lo pueden aguantar más".
Por ello esta semana han acudido a Guadalajara, para presentar las 1.359 firmas recogidas entre los vecinos de las pedanías y municipios afectados. Vecinos de Romanillos de Atienza, Bañuelos, Miedes, Casillas, Bochones, Atienza, Cincovillas, Sienes, Torredelrrabano, Paredes, Valdecubo, Tobes, Querencia, Riba de Santiuste, La Barbolla, Villacorza, Imon, Cercadillo, Alpedroches, Tordellose, Hijes y Hujados, que quieren ser escuchados.
Su intención es que se ponga solución a la "situación ignorada durante años" y se garantice la atención telefónica por parte de la empresa que presta el servicio para poder hacer uso del transporte público.
Solicitan también una mejora en las frecuencias, ya que para muchos vecinos el autobús es el único medio de transporte del que disponen para acudir al médico o realizar otras gestiones en servicios que no están presentes en sus localidades.
Denuncian una reducción "cada vez más salvaje de servicios", que convierte a quienes viven en estas zonas en "ciudadanos de segunda", al privarles del mismo acceso a los beneficios del estado del bienestar.
Por ello, para que su situación se conozca y se pongan en marcha los mecanismos para dar una solución, han presentado su escrito a la Consejería de Fomento de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, dando también traslado del mismo a todos los grupos políticos con representación en las Cortes.
