Page sostiene que el "egoísmo de Cataluña" no va a llegar "a ningún lado" porque "ya estamos los demás" para impedirlo

El presidente de Castilla-La Mancha defiende la igualdad y la armonización en materia de financiación autonómica frente a quienes "solivianta" el artículo 14 de la Constitución.
El jefe del Ejecutivo castellanomanchego, Emiliano García-Page, ha realizado estas declaraciones durante el acto en Toledo del XX Aniversario del 1-1-2 en la región. —  E. GONZÁLEZ
photo_camera El jefe del Ejecutivo castellanomanchego, Emiliano García-Page, ha realizado estas declaraciones durante el acto en Toledo del XX Aniversario del 1-1-2 en la región. — E. GONZÁLEZ

TOLEDO.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha advertido a quienes "solivianta" hoy el artículo 14 de la Constitución, por el que se establece la igualdad de todos los españoles, que su intención de "no ser iguales" no va a llegar "a ningún lado", puesto que "ya estamos los demás" para impedirlo.

Así se ha referido el jefe del Ejecutivo autonómico al "egoísmo de Cataluña", poco antes de desplazarse a Madrid para participar en la reunión convocada en Ferraz por el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con los 'barones' socialistas para abordar la financiación autonómica y las suspicacias generadas con el encuentro de presidentes autonómicos convocado para el próximo 23 de noviembre en Santiago de Compostela, al cual García-Page ya ha manifestado su intención de acudir.

Un mensaje que lanzaba poco antes de desplazarse a Madrid para participar en la reunión convocada en Ferraz por el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con los 'barones' socialistas para abordar la financiación autonómica y las suspicacias generadas con el encuentro de presidentes autonómicos convocado para el próximo 23 de noviembre en Santiago de Compostela, al cual García-Page ya ha manifestado su intención de acudir.

García-Page se ha mostrado convencido de que "la mejor manera de romper clichés, tabúes y locuras" es tener la seguridad de que cuando hay un problema "todo el mundo se vuelca".

Un contexto en el que ha recordado que si al igual que ahora está ocurriendo con La Palma, una situación en la que "todo el mundo se está volcando", se produjera una incidencia en Cataluña, "no habría ningún problema en que todo el mundo se volcara", puesto que "no hay nada que temer".

Y es que "más allá del ruido con el que estamos acostumbrados a hacer política en España", con el que "es muy difícil escuchar a los otros", lo realmente importante, como se ha demostrado con la crisis de la covid-19, es que la "coordinación" existente, que hace que "seamos todos uno".

Para García-Page la gente lo que quiere es que, a pesar del ruido y de que se pueda discutir, puesto que la democracia consiste en ello, es que se llegue a acuerdos, "pero no a costa de la eficacia". "Primero hay que resolver los problemas, y luego discutir", ha apostillado, puesto que "hay que ser eficaces por encima de todo".

Considera el presidente castellanomanchego que el "egoísmo" es "un gran adversario a combatir", en un contexto globalizado en el que "cuesta más compartir la riqueza" que los miedos, las inseguridades o los problemas.

No obstante, "como ciudadano español y como presidente de una autonomía", García-Page ha querido dejar claro que en Castilla-La Mancha "no somos autónomos ni para darnos golpes de pecho, ni para ser más; pero no para ser menos".

Considera esencial que en un país "complejo" como es España, en el que son "muchísimas las administraciones", en el que con la descentralización del 78 se ha ganado en el servicio a la gente, pero se ha aumentado la complejidad del sistema, es necesario "tener muy claras las prioridades del gasto público".

Así, ha apuntado que salvo los fondos europeos que ahora se comienzan a gestionar y van a suponer una "extraordinaria" simiente para la creación de empleo, ya no va a haber "presupuestos sobrantes", por lo que en qué se gasta el dinero tiene que estar muy ajustado.

"No hay mucho margen de maniobra", ha añadido García-Page, "salvo que uno se plantee grandes recortes o giros que no son convenientes", al tiempo que ha advertido que "dejar de invertir en los grandes servicios públicos" sale "carísimo".

"Conviene crecer, tener cada día más riqueza, sí, pero hay que plantearse para qué".

García-Page ha recordado que cuando la sociedad española pasa de la dictadura a la democracia una de las decisiones, junto a que decide la gente en secreto, fue que no solo hubiera derechos civiles, sino también sociales, la igualdad. Algo frente a lo que ahora algunos se "soliviantan" y que Page no está dispuesto a permitir.

El presidente castellanomanchego ha señalado que "la operación más arriesgada" del país fue pasar del modelo centralizado a un modelo "muy descentralizado", en el que sin embargo "algunos" aún siguen reclamando competencias, algo "absurdo" y que "no tiene lógica", puesto que con las actuales "no damos abasto".

Para García-Page el país "está como está, y está bien", aunque reconoce que hay "problemas" y que es necesario "armonizar".

En su opinión, "la primera condición" para que se pueda repartir el trabajo es que "lo esencial esencial funcione", y eso -ha apostillado- "coincide milimétricamente con lo más valorado por todos".

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