TOLEDO.- Operación contra el tráfico de drogas en Toledo. La Guardia Civil ha incautado casi 2.000 plantas de marihuana y ha detenido a los tres presuntos cabecillas de la banda, a los que se les imputa un delito contra la salud pública, otro por organización criminal y un tercero por defraudación del fluido eléctrico.
La Benemérita inició una investigación sobre varias naves industriales ubicadas en el polígono industrial Mariola de la localidad de Huescas, donde sospechaban de la existencia de varias plantaciones indoor.
Después de varias semanas, los agentes pudieron determinar que un grupo de personas se hacía cargo de cuatro naves en cuyo interior se realizaba el cultivo de esta sustancia estupefaciente.
En el registro, se hallaron un total de 1.849 plantas de marihuana, en avanzado estado de floración, siendo intervenidas junto a una carabina de aire comprimido, dinero en efectivo, una furgoneta y un turismo de alta gama.
Los agentes desmantelaron la infraestructura por completo, la cual se sustentaba gracias a un enganche ilegal a la red eléctrica.
También descubrieron que los presuntos delincuentes estaban efectuando obras de acondicionamiento en otras dos naves con la finalidad de instalar nuevas macrocultivos con capacidad para decenas de miles de plantas.
Finalmente, el instituto armado detuvo a dos hombres y una mujer de nacionalidad española, con edades comprendidas entre los 35 y los 51 años. Tanto los detenidos como las diligencias han sido puestas a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Torrijos.
La intervención ha sido coordinada por el Equipo contra la Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Guardia Civil de Toledo, en el marco de la operación 'Navehuecas-Miller' emprendida a nivel nacional.
