Page augura que habrá carnavales y Semana Santa con medidas "distintas" pero sin prohibiciones

El presidente del Ejecutivo castellanomanchego considera que el objetivo es llegar al verano con el 95 por ciento de la actividad y la convivencia habitual.

TOLEDO.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, es optimista respecto a la evolución de esta sexta ola de la pandemia y lo que sucederá con el virus en los próximos meses, y augura una primavera con un escenario "totalmente distinto" al actual. Así, está convencido de que, incluso antes, se podrán celebrar no solo los carnavales y la Semana Santa, sino también las fiestas patronales de numerosos pueblos, "con sus respectivos festejos" -ha precisado- tomando medidas distintas habituales pero en ningún caso prohibiéndolos.

Así lo ha señalado el jefe del Ejecutivo autonómico, durante un acto que con motivo de la firma del convenio para la remodelación del Parque de la Alameda de Sigüenza se ha celebrado en el toledano Palacio de Fuensalida.

Durante su intervención, García-Page ha defendido que a lo largo de esta última ola de la pandemia, Castilla-La Mancha ha conseguido mantener unos indicadores mejores que la media española, "con unas medidas más acomodadas a lo que entendíamos que era útil".

En este sentido el presidente regional ha señalado cómo "en los primeros momentos hubo que tomar medidas drásticas, sobre todo en los interiores era determinante"; cuando el país decidió no tener estado de alarma y se "desabrocha" en materia de movilidad, fue "evidente que muchas de las medidas pensadas para ese momento tienen ya una utilidad muy relativa".

Un punto en el que ha aprovechado para tildar de "curioso" que algunas administraciones decidieran aplicar el pasaporte covid "y al mes hayan dado cuenta de que no les está funcionando".

Algo que "no es culpa de nadie", ha precisado, puesto que el objetivo de todo el mundo es "hacerlo bien". No obstante, ha recordado que Castilla-La Mancha está comenzando el año, tras toda la campaña de Navidad que "ha ido bastante bien en términos turísticos y económicos, y desde luego para la hostelería", "hoy con un 20 por ciento menos de covid que hace una semana".

Un dato que sitúa a la región como la tercera comunidad autónoma "más baja" en impacto del covid.

Un contexto en el que García-Page cree que podría llevar a lo que se plantea desde la Organización Mundial de la Salud de cara a los próximos meses, con una primavera en la que se esté viviendo "un escenario totalmente distinto". No ya tanto de eliminación definitiva del virus, ha precisado el presidente regional, sino un escenario en el que "prime más recomponer y recuperar la convivencia".

Así se ha mostrado convencido que incluso antes del cambio de estación se podrán celebrar los carnavales, y más adelante la Semana Santa, pero también fiestas patronales en los distintos pueblos de la región.

Y aunque admite que será necesario "tomar medidas distintas a las habituales", considera que en todo caso no se prohibirán.

Para el jefe del Ejecutivo regional "el objetivo" es llegar al verano "con el 95 por ciento de la actividad y la convivencia habitual", y en pleno proceso de recuperación económica, algo en lo que Castilla-La Mancha "está siendo un ejemplo en España".

Comentarios