TOLEDO.- El jefe del Ejecutivo castellanomanchego, Emiliano García-Page, se ha dirigido este miércoles a los "demagogos" que creen que la paz se consigue únicamente "de brazos caídos", para recordarles que si bien "nadie quiere la guerra", estar contra ella hoy es también estar contra el que la ha provocado.
Así lo ha señalado durante su intervención en el acto que ha seguido a la firma de la Alianza por los Servicios Ecosistémicos de Castilla-La Mancha con los ayuntamientos de las cinco capitales de provincia de la región. Una cuestión la medioambiental en la que, como en el caso de la crisis desatada por "la invasión de Putin, el terrible", se pone de manifiesto la necesidad de sumar entre todos.
En este sentido, García-Page ha recordado que los problemas del mundo actual no se pueden combatir "solos y por libre", sino que es necesario "ir construyendo redes", como en la Unión Europa.
El presidente regional considera que el papel de España dentro de la UE está siendo "muy positivo", y ha recordado a quienes abogan por la inacción para conseguir la paz, que no es así como se logra.
REACCIÓN "CALCULADA E INTELIGENTE"
Y es que, en su opinión, "lo último que esperaba Putin era una reacción calculada e inteligente". "Podía esperar una reacción alocada" -ha precisado- pero "la locura se combate con racionalidad".
De este modo el jefe del Ejecutivo autonómico ha querido dejar claro que "nadie quiere la guerra", pero también que "estar contra la guerra hoy, es estar contra el invasor, contra Putin, contra el que ha provocado la guerra". Por ello, ha insistido, "el que no lo quiera ver así se engaña a sí mismo y engaña al mundo entero".
En esta línea, García-Page considera que habría que plantearse "qué pensaríamos en España si esto nos estuviera pasando a nosotros o nos quedara cerca", de ahí la importancia de estar en una alianza que "lo que significa es seguridad".
"Quién iba a decir que estarían llamando a la puerta para sentirse seguros otros países en el mundo", ha apostillado.
