CIUDAD REAL.- Agentes de la Guardia Civil y los bomberos del parque de Almadén han tenido que ayudar a los residentes de un centro de salud mental de la localidad ciudadrealeña que sufrió inundaciones.
Durante la tarde del 29 de marzo, el instituto armado recibió un aviso en el que se informaba de que la residencia comunitaria del pueblo minero se había inundado como consecuencia de las fuertes lluvias que se produjeron aquella jornada.
Cuando los guardias civiles se personaron en el lugar, se coordinaron con los bomberos para desatascar a través del alcantarillado la gran cantidad de agua que había en la calle. También retiraron un vehículo que, arrastrado por la corriente, obstaculizaba la entrada a la residencia.
Al acceder a su interior, se la encontraron totalmente anegada, por lo que se llevaron a cabo labores para desatascar y limpiar la planta baja, donde se encontraba una persona de avanzada de edad, que por problemas de salud no había podido ser movilizada.
