Alberto Núñez Feijóo ha ofrecido declaraciones durante su visita a Villarrobledo (Albacete). | PP

ALBACETE.- Primera visita a Castilla-La Mancha como presidente nacional del PP y buenas palabras para el jefe del Ejecutivo castellanomanchego. Alberto Núñez Feijóo ha recordado en su visita a Villarrobledo (Albacete) este jueves que conoce a Emiliano García-Page desde que el PSOE recuperó la Presidencia de esta región por todos los momentos que han compartido y que han culminado en acuerdos genéricos de ocho presidentes autonómicos, y "eso es importante", ha apostillado.

Con buenos ojos ve la propuesta lanzada por García-Page para llegar a grandes pactos entre PSOE y PP a nivel nacional, pero no ve posible lograr acuerdos con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, porque "de momento prefiere llegar a acuerdos con el independentismo vasco y catalán", con "aquellos a los que le debe la Presidencia", lo que ha dicho que no es una opinión sino "a crónica de los últimos cuatro años".

Sin embargo, ha considerado que "sería bueno, si es posible, que García-Page influya un poco más en el PSOE y que haya más PSOE y menos partido de Sánchez", algo que cree que beneficiaría no solo a Castilla-La Mancha sino al conjunto de España. Pero "de momento, el partido de Sánchez le está ganando por mucha diferencia al Partido Socialista Obrero Español", ha añadido.

Y, por su parte, García-Page ha seguido hablando de pactos entre "los grandes partidos" y, en esta ocasión, en concreto ha abogado por un acuerdo en relación al gasto de medicamentos, porque se trata de "miles de millones" de euros y de las relaciones entre el sistema público con la macroindustria farmacéutica. Un acuerdo estratégico sobre el medicamento al que ya se refería hace algo más de un mes el presidente regional, al ser este uno de los puntos en los que veía viable el entendimiento con el nuevo líder del PP a nivel nacional, al haberlo planteado ya durante su etapa de gobierno en Galicia.

"Yo estaría dispuesto a facilitarlo y a presionar en esa dirección", ha asegurado, a la vez que ha criticado que en España "ahora hay tanto ruido en la política que es casi imposible escucharse" y que "se pierde mucho el tiempo en hablar de cosas que no van a ningún lado".

Y es que para el presidente castellanomanchego el gasto farmacéutico "no es un tema menor" e incluso ha vaticinado que si se juntan todos los consejeros de Sanidad llegarían a la misma conclusión y análisis, con el consiguiente objetivo de poder racionalizar, que no recortar, y establecer un sistema "bueno y eficaz al cien por cien".

Sobre todo ahora que no es previsible lo que vale un medicamento porque todos los días aparecen nuevos y "a precios astronómicos", por lo que ha incidido en que es preciso llegar a acuerdos "prácticos y concretos" y dejar de discutir sobre "si España es una nación o muchas" porque eso es "perder el tiempo".

También en materia sanitaria García-Page ha reivindicado el Sistema Nacional de Salud del que goza este país con una sanidad universal y para todos y ha abogado por ponerse como objetivo llegar al 7 por ciento de gasto sanitario en el Producto Interior Bruto (PIB) superando así la marca actual del 6,6 por ciento.

Castilla-La Mancha gasta tres millones de euros al día solo en farmacia, 1.000 millones al año, y por eso García-Page dice que no se cansa de pedir más dinero y un sistema de financiación autonómica acorde a las necesidades y cree que "la gente tiene que saber que cuando nos desgañitamos por pedir más dinero no es para caprichos ni para tener policía autonómica, que no la queremos porque estamos muy contentos con la Guardia Civil y la Policía Nacional, sino que es para gasto social".