TOLEDO.- Este jueves comienza el curso de la "vuelta a la normalidad" para algo más de 399.000 alumnos en Castilla-La Mancha, aunque ya lo hiciera oficialmente hace unos días con la incorporación de todo el personal docente y no docente de los centros educativos de la región.
Una vuelta a las aulas con unas condiciones de organización y funcionamiento "muy distintas" a las de los dos cursos anteriores, retomando el "normal desarrollo" de los procesos de enseñanza y aprendizaje, y en la que no será necesaria la aplicación de medidas sanitarias excepcionales en clase.
Así lo ha destacado la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, quien ha recordado también los "nuevos retos" que marcan este curso 2022/2023, como la implantación de la nueva ley educativa, la LOMLOE, en los cursos impares; así la continuidad de otros en los que ya se venía trabajando como la apuesta por la Formación Profesional, la inclusión educativa, la digitalización, la mejora de infraestructuras, el ahorro energético en los centros y la mejora de las condiciones laborales del profesorado.
Curso en el que convivirán dos normativas y en el que Castilla-La Mancha "demostrará que su sistema educativo y su comunidad educativa están preparadas para los nuevos retos del presente que, en definitiva, son los retos del futuro".
Un curso escolar que comienza con 399.055 alumnos en la educación no universitaria, que estarán repartidos en 1.214 centros sostenidos con fondos públicos (a los que se suman aquellos de titularidad municipal que ofertan enseñanzas no obligatorias), y 32.753 docentes, apenas un 0,9 por ciento menos que el curso pasado, pese a la disminución del alumnado y la desaparición de los protocolos sanitarios.
Punto en el que Rodríguez ha destacado que "la inmensa mayoría del profesorado contratado el curso anterior" se ha destinado a atender otras necesidades, como las derivadas de la bajada de ratios, la modernización de la FP, el nuevo sistema de Bachillerato -que se oferta en medio centenar de centros de toda la región- y la implantación de nuevas enseñanzas.
Un curso en el que se continuará apostando por la formación del profesorado, para el que se han previsto más de 3.600 acciones formativas, y que comienza con más de 80.000 dispositivos informáticos en los centros, a los cuales se sumarán otros 32.800 en los que se invertirán 48 millones de euros.
Asimismo la consejera ha detallado que este curso se han concedido 18.812 ayudas de comedor escolar, un 10 por ciento más que el curso pasado, destinadas a familias en situación económica desfavorecida, y otras 64.896 de uso de libros de texto, lo que supone un incremento del 16 por ciento.
En total serán 83.708 ayudas, 10.661 más que el curso anterior, debido en buena parte al aumento de los umbrales de renta establecidos con el objetivo de facilitar la adquisición de los nuevos materiales derivados de la implantación de la Lomloe.
Convocatorias, ha recordado, que permanecen abiertas a lo largo de todo el curso, de modo que aquellas familias que lleguen a la región pueden solicitarlas si lo necesitan.
Por otra parte, también en materia de servicios complementarios, la consejera ha detallado que este curso se abren 17 nuevos comedores escolares y 12 nuevas aulas matinales, mientras que serán 1.052 las rutas de transporte escolar para cerca de 26.000 usuarios.
En lo que respecta a los programas de plurilingüismo, serán 521 los centros que desarrollen 654 proyectos -seis menos que el curso pasado-, de los cuales 76 son de bilingüismo en Formación Profesional. Apuesta por los idiomas que también se amplía a la formación de personas adultas, con la implantación de distintos niveles de inglés entre sus enseñanzas.
Del mismo modo, en cuanto a las enseñanzas de régimen especial, la consejera de Educación ha destacado la puesta en funcionamiento de la Escuela de Arte Dramático en Cuenca, con la especialización de Interpretación en este primer curso.
Respecto a la Formación Profesional, Rosa Ana Rodríguez ha insistido en que vuelve a ser un curso más "objetivo prioritario" del Gobierno regional, de modo que se han ofertado algo más de 44.000 plazas -2.000 más que el curso pasado-, para 979 ciclos formativos de grado básico, medio y superior, de los cuales 49 son de nueva creación y 9 en modalidad a distancia, contando estos últimos con 8.700 plazas en total. Igualmente se ofertarán 28 cursos de especialización, cinco de ellos nuevos, con 520 plazas.
Para la FP Dual , por su parte, se han autorizado 84 nuevos proyectos, de modo que la oferta global asciende a 310 proyectos, para cerca de 5.000 alumnos.
En materia de inclusión educativa, la consejera ha destacado que se este curso se contará en la red de apoyos con un total de 2.517 docentes y el mantenimiento de los profesionales no docentes que están al tanto de otras necesidades en materia de inclusión educativa. Profesionales a los que se sumarán los efectivos docentes que se contratarán de forma extraordinaria para dar respuesta al Plan Estratégico de Alumnado Vulnerable, tanto en lo educativo como en lo social.
Igualmente ha destacado el incremento del número de equipos de atención individualizada para el alumnado TEA, el aumento en 2 unidades de Educación Especial en Cuenca y el nuevo programa específico de FP sobre actividades auxiliares de comercio en Alcázar de San Juan.
Un nuevo curso escolar con retos, cambios y novedades que la comunidad educativa castellanomanchega abordará "con normalidad", tal y como ha subrayado la consejera.
