Hoy me he despertado con una previsión informativa que casi hace que me atragante con la tostada. Resulta que el ex presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy va a acompañar esta tarde al presidente del PP de Castilla-La Mancha Paco Núñez, y al candidato del PP a la alcaldía de Puertollano Miguel Ángel Ruiz en un acto público en Puertollano.

Enseguida se me han venido muchas imágenes y conversaciones a la cabeza. Portadas de periódicos, concentraciones de trabajadores, amigos que me llamaban para decirme la cantidad de familias que estaban en peligro en la localidad y los gritos desesperados de cientos de trabajadores que fueron viendo como su futuro laboral se desvanecía mes a mes. Me pregunto qué sentirán los vecinos de Puertollano cuando vuelvan a encontrarse con la persona que autorizó el cierre de Elcogás dejando a cerca de 150 familias en la calle.

La misma persona, Mariano Rajoy, que miró desde arriba cÓmo en apenas unos 3 años, cerca de 2.000 empleos relacionados con las energías limpias y renovables se destruían en la comarca de Puertollano: Silicio Solar, Solaria, E-ON… Todo esto, mientras todos los países avanzados e industrializados de la UE invertían en energías limpias y renovables, para poder ganar soberanía energética.

Puertollano es una comarca fuerte, de gente luchadora que ha sabido reinventarse y reponerse a multitud de golpes. Pero también tiene memoria. Y hay cosas, que por mucho que uno perdone nunca olvida.

El señor Rajoy viene hoy a Puertollano a acompañar a sus amigos de partido, y a encontrarse con los puertollanenses, mientras que hace unos años ni siquiera contestaba las llamadas de auxilio de los trabajadores de esa misma localidad que pedían desesperadamente un encuentro para buscar soluciones a su futuro.

Ha sido palo tras palo a la economía de la localidad y de la comunidad autónoma durante su mandato, pero hoy decide venir de visita.
Lo único bueno es que se va a encontrar una tierra mucho más sana de la que dejó. Porque a pesar de las adversidades y el pesimismo sufrido por sus vecinos durante ese tiempo, ha levantado la cabeza.

Puertollano sigue apostando por las energías renovables, como las fotovoltaicas, y el hidrógeno verde. Hay nuevos proyectos solares y allí se instalará la primera siderurgia greenfield de la península ibérica y una de las primeras de Europa, de la que se pretende sacar el primer rollo de acero verde en 2026. Y todo esto no cae del cielo.

Lo que ahora me pregunto es… si hace unos años nos vanagloriábamos de que Puertollano era el faro industrial de Castilla-La Mancha y vivió lo que vivió durante el mandato del Partido Popular, ¿qué podría pasar si vuelven al Gobierno? Dejo la pregunta abierta. Aunque me temo, que todos y todas saben la respuesta. No podemos consentir que Puertollano vuelva a dejar de brillar.