TOLEDO.- Al presidente de Castilla-La Mancha y candidato socialista a la reelección, Emiliano García-Page, no le convencen las explicaciones del candidato del PP, Paco Núñez, sobre el cobro indebido de dietas de kilometraje que le habría reportado a lo largo de esta legislatura alrededor de 8.000 euros. Y es que el "error administrativo" con el que excusa el dirigente popular estos sobresueldos, no solo no es posible para el socialista, sino que "pasa de castaño oscuro" al disponer además de coche oficial.
Así lo ha señalado el jefe del Ejecutivo castellanomanchego durante una entrevista en el programa 'Herrera en COPE' al ser preguntado por las explicaciones ofrecidas por el candidato del PP tras destaparse estos cobros.
"Puede ser que alguien diga que no sabe lo que ingresa, o que no estás pendiente de la cuenta corriente todos los días", ha admitido, "pero para poder obtener dietas de kilometraje se tienen que firmar documentos donde se pide que se libre porque se ha ejecutado tal gasto".
Al margen de esta puntualización, con la que ha puesto de manifiesto que el error no tiene cabida en este planteamiento, al requerir de una firma específica para la solicitud de kilometraje, García-Page también ha llamado la atención sobre el hecho de que, al igual que él, Núñez tiene a su disposición un coche oficial.
"Yo tengo coche oficial, me reprochan constantemente que lo use, cuando realmente es lógico tenerlo". "Es un coche de servicio, para entendernos, como lo tienen los guardas forestales o multitud de servidores públicos" -ha apuntado-, aunque asegura que lo que nunca se le pasaría por la cabeza, "bajo ningún concepto", sería "teniendo a mi disposición un coche oficial, además cobrar dietas". "Eso pasa de castaño oscuro, no hay quien pueda explicarlo", ha sentenciado.
"NI ESTRATEGIA DE FONDO, NI CONSPIRACIÓN"
En otro orden de cosas, y preguntado si en caso de perder la presidencia autonómica por el descontento hacia Sánchez, se iría al Senado a impulsar una alternativa de futuro dentro del PSOE, García-Page ha asegurado no estar "en ningún tipo de estrategia personal" y que su objetivo no es otro que "desde la comunidad autónoma, defender que esta tierra sea escuchada al mismo nivel que el resto, opinar de aquellos derechos constitucionales de mi tierra y míos como persona, que se ven afectados por la gestión independentista".
Y es que, ha insistido, "puedo decir lo que pienso" y tras ello -ha recalcado- "no hay estrategia de fondo ni una conspiración", sino que tiene claro "lo que me gusta y no me gusta, lo que votaría o no".
Por ello, "estemos en campaña o no", deja las cosas claras, sin que "ni detrás ni delante haya ningún tipo de intención personal".
HAY QUE PONER LA LETRA
Por otra parte, durante la entrevista García-Page ha sido también preguntado por la Ley de Vivienda que, previsiblemente, aprobará el Congreso este jueves. Respeto a ella ha señalado que por el momento "estamos en la presentación global del marco", y que ahora "tiene que venir el dibujo completo".
En este sentido, el presidente castellanomanchego ha señalado que no se conoce cómo se pretenden implementar las medidas concretas, al tiempo que ha distinguido entre la ley que como tal delimita el marco normativo que regulará los alquileres o la compra de vivienda, por ejemplo, y las políticas concretas que no requieren ley de ningún tipo.
Respecto a esto último Page ha precisado que "en la medida en la que el Estado es propietario de suelos y de viviendas a través de la SAREB, puede ponerlas en circulación de una manera u otra", aunque esto tendrá que ser de acuerdo con las comunidades autónomas. "Tendrá que ser sin esa estrategia del invito yo, pero pagas tú", ha apostillado. Una intención que "está en pañales" y a la que aún "hay que poner mucha letra, mucha partitura", ha sentenciado.
También en relación a la Ley de Vivienda y la enmienda pactada, entre otros, con Esquerra Republicana y Bildu, que dificulta el proceso de expulsión de okupas y de inquilinos que dejan de pagar. Sin conocer el detalle de la misma, tal y como ha advertido, el presidente castellanomanchego ha señalado que, de partida, el que sea con ERC y Bildu "ya no me agrada", al considerar "muy difícil que de ahí venga algo en positivo".
En cuanto a la enmienda en sí, Page ha señalado que hay que distinguir "de qué tipo de ocupantes de vivienda hablamos", puesto que a él le preocupa "el ocupa que no tiene título, no el inquilino". Considera así que debe abordarse un debate si de lo que se trata es, por ejemplo, de endurecer las condiciones para expulsar de una vivienda a quien se retrasa en el pago del alquiler tres o cuatro meses, "pero si lo que se pretende es hacerlo más difícil para el que ha entrado sin título, dando una patada, me preocuparía".
Por otra parte, ha recordado el compromiso adquirido por el Gobierno central con Castilla-La Mancha para trasladar a la legislación nacional "la parte más sustancial" de la iniciativa legislativa aprobada en las Cortes, la cual "cambiaba de raíz el problema de los ocupas ilegales", habilitando entre otra medidas la expulsión en 48 horas, y que ayuntamientos y comunidades pudieran instar al desahucio, de modo que este fuera exprés.
