El paro baja en Castilla-La Mancha en 3.509 personas en noviembre, casi el triple que en toda España

TOLEDO.- Castilla-La Mancha cierra noviembre con 3.509 personas menos en las listas del desempleo; un descenso del 2,04 por ciento, que supone el mayor descenso del paro de toda la serie histórica para este penúltimo mes del año, situándose el número total de desempleados en la región en 168.653 personas.

De este modo, según los datos ofrecidos por el Ministerio, el número de afiliados se situó en 698.643, de los cuales 226.862 se encuentran en la provincia de Toledo; 137.388 en Albacete; en Ciudad Real son 165.540, mientras que en Guadalajara son 93.601 y en Cuenca 75.251.

CRÍTICAS DE LOS SINDICATOS

Además, los datos del paro de la región publicados este martes han suscitado numerosas reacciones. Entre ellas la de Comisiones Obreras, desde el que consideran "negativa" la bajada de 3.509 desempleados, porque "solo esconden precariedad y un cambio de las pautas de consumo con compras que se adelantan al mes de noviembre por las campañas de descuentos".

En este sentido, la secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales del sindicato, María Ángeles Castellanos, ha indicado que también se han dejado notar las contrataciones vinculadas a la campaña de la aceituna.

Castellanos lamentaba así que en la región hay 92.929 personas en paro sin ningún tipo de prestación ni subsidio, por lo que "el descenso del paro registrado solo es un número", ha dicho, para después sentenciar: "Alegrarse por un número que puede parecer positivo es hacer un análisis muy pobre de la realidad en la que vivimos, la precariedad laboral conlleva precariedad en la vida de las personas, que además han perdido muchas de las redes de protección con las que contaban por los recortes de los servicios públicos".

Por su parte, desde UGT han puesto el foco en el descenso del número de afiliados a la Seguridad Social en la región, que ha caído en Castilla-La Mancha casi el triple que en España, lo cual atribuyen al "frenazo" del mercado laboral en la región "después de dos años arrastrados por el crecimiento a nivel europeo".

El líder regional de este sindicato, Carlos Pedrosa, apuntaba que ese descenso se debe a que en la región "no se había solucionado ningún problema de fondo" y "en cuanto la locomotora que venía siendo Europa diera síntomas de resfriado, Castilla-La Mancha cogería pulmonía".

 Pedrosa considera que la región tiene un modelo productivo intensivo en mano de obra, pero "excesivamente temporal, precario y nada diversificado en sectores".

Y es que, apostillaba, "solo hay que ver el aumento del paro en industria y construcción; el empleo que hemos creado en noviembre ha ido ligado a las campañas comerciales de prenavidad y a la poda de la vendimia y se destruirá en cuanto pasen esas épocas".