Las botargas dan la bienvenida al invierno: una invitación a recorrer cuarenta lugares con encanto de Guadalajara

Apenas unos días después del inicio del invierno, tras un solsticio a partir del cual las horas de luz van en aumento, sitúa la tradición un pasado cultural que marca también el inicio de la estación, asociando ese alargamiento progresivo de los días a una victoria de la luz sobre la oscuridad, acompañada desde tiempos ancestrales de rituales y celebraciones festivas.

Pasado y presente de la fiesta de invierno más especial en la provincia de Guadalajara, las Botargas, una celebración que cuenta con la declaración de Interés Turístico Provincial y que ya trabaja para convertirse en Bien de Interés Cultural en la categoría de Inmaterial.

Cuarenta lugares con mucho encanto de la provincia son los que invita a recorrer la Ruta de las Botargas, una propuesta de la Diputación de Guadalajara en colaboración con la asociación La Tradición Oral, que arranca este 24 de diciembre, día de Nochebuena, con la botarga de Tórtola de Henares, extendiéndose hasta principios de septiembre cuando tocará a su fin con la botarga de Majaelrayo.

La más madrugadora de estas botargas, según la tradición recuperada hace unos años, salía la tarde del día de Nochebuena para recoger comida que serviría el día después de Navidad para merendar, a modo de aguinaldo anticipado.

Una botarga de vestimenta arlequinada, armada con cayado y cachiporra para llamar a las puertas, y haciendo sonar sus cascabeles y cencerros atados a la cintura que a la caída del sol también desaparece.

Da comienzo así una ruta que tiene su continuación en el calendario la mañana de Navidad, con la botarga de Fuentes de la Alcarria, donde justo a la salida de la misa, la Pantasma y el Alforjero comienzan su recorrido por las calles del pueblo, asustando a la gente y tiznando a quienes encuentran a su paso. Un recorrido en el que también entran en las casas en busca del aguinaldo, así como de aquellas almas que pretendan esconderse de ambos.

La última del año es la del Diablo de Setiles, que el 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, recorre esta localidad del Señorío de Molina desde el amanecer, cara tiznada y espada de madera en mano para atizar a quien se ponga por delante.

Arranca de este modo la jornada a lo largo de la cual el Diablo va consiguiendo pañuelos para adornar su espada, interrumpe la parte central de la misa y a última hora se subastan los pañuelos requisados.

No son muchos días los que habrá que esperar para las siguientes citas, puesto que ya el 1 de enero son tres las que salen a la calle.

La botarga de Alarilla, en la que se celebra el Año Nuevo con la salida del Zarragón, que después de las campanadas, vestido de llamativos colores, máscara y cencerros atados a la cintura, recorre las calles de la localidad asustando a los vecinos y anunciando la llegada del nuevo año.

Ya por la mañana, sube a la iglesia y con su porra impide el paso a las mujeres, a las que según la tradición no dejará pasar hasta que le den una pequeña propina; tras la misa, el reparto de bolsas de anisillos y frutos secos, para continuar danzando con el vecindario.

Después de las campanadas de fin de año, un mozo de la localidad se viste con el traje tradicional del Zarragón, caracterizado por su variedad de colores, una máscara y una serie de cencerros atados con una correa a la cintura, que hará sonar mientras recorre las calles de Alarilla, asustando a chicos, jóvenes y mayores, anunciando de esta forma que el año nuevo ha llegado.

Una vez finalizadas las celebraciones del año nuevo, por la mañana alrededor de las 11.00 horas el Zarragón sube a la iglesia, donde atraviesa su porra, impidiendo el paso a las mujeres, hasta que estas le dan una pequeña propina, según manda la tradición; al término de la misa reparte unas bolsas de anisillos y frutos secos, y continua danzando con el resto de la gente.

También anuncia la llegada del nuevo año la botarga de Humanes de Mohernando, llamando a las puertas para felicitar el año a la vecindad. Perseguida por los niños del pueblo, que tratan de agarrar la 'higa', una especie de rabo que lleva la botarga, recorre las calles de la localidad, haciendo sonar los 31 cascabeles que cuelgan de su traje -uno por cada día del mes- y las siete campanillas que penden del cinturón -una por cada día de la semana-.

Con el tañer de las campañas que anuncian la misa, la botarga corre a la puerta de la iglesia, pidiendo limosna a los feligreses que quieran entrar al templo. A la salida de la celebración religiosa, se la puede ver de nuevo recorriendo y alborotando todo el pueblo.

Por su parte en Robledillo de Mohernando es la botarga de Casados que la anuncia el nuevo año, haciendo sonar sus campanillas y cencerros para despertar a los vecinos.

Botarga que no duda en entrar en las casas a levantar a los más perezosos, pedir alguna limosna y de paso, felicitar el año. Con su cachiporra hecha de una rama de olivo y su colorido traje en el que no faltan figuras como el sol, la luna o las estrellas, recorre la localidad en busca de limosna.

Continúa el calendario de esta Ruta de las Botargas con nuevas citas el primer domingo después de Reyes, en este caso la cita será el 8 de enero, en Valdenuño Fernández, con la salida de su botarga y el paloteo, una danza protagonizada por jóvenes del pueblo.

El día 14 será el turno de la botarga de Villaseca de Uceda, que se recupera en este 2023 tras llevar años perdida. En torno al mediodía comenzará su recorrido por las casas del pueblo.

Un día después tendrá su primera salida del año la botarga de Retiendas, que repetirá ya en el mes de febrero durante la fiesta mayor de la localidad, en honor a la Virgen de la Candelaria.

Una Ruta de las Botargas que continúa el 17 de enero, en la festividad de San Antón, en Guadalajara. El Manda -su personaje principal-, acompañado por los dos mandaderos y la botarguilla- recorre la calle Mayor y juega al Alhiguí con los viandantes.

Por su parte la cita con la botarga de Montarrón es los días 19, 20 y 21 de enero, coincidiendo con la festividad de San Sebastián. Antes de misa la botarga recorre el pueblo pidiendo limosna a todo el que se encuentra, siendo sus danzas y el sonar de sus campanillas, ahuyentadoras de los malos espíritus, la alegría de la fiesta.

El día 21 también se puede disfrutar de la botarga y el bufón de Mohernando, una curiosa pareja de enmascarados, vestidos con llamativos colores, que recorre la localidad pidiendo a los vecinos; así como de la botarga de Razbona, vestido de morado y rojo, que haciendo sonar los cencerros y mazo en mano, recorre esta pedanía de Humanes buscando a sus víctimas.

La botarga infantil de Robledillo de Mohernando, única en su género, y la botarga de Taracena, saldrán a las calles el día 22 de enero; mientras que la botarga y soldadesca de Mazuecos vivirá sus salidas los días 24, 25 y 29.

Completarán el calendario del mes de enero la botarga de Fuencemillán, el día 28 en honor de San Pablo, y un día después la botarga de Málaga del Fresno, que recorre la localidad acompañada de las Mujigangas, asustando a los más pequeños y obsequiando caramelos a los mayores.

Ruta de las Botargas que durante el mes de febrero invita a visitar localidades como Arbancón (día 2 y día 4), Albalate de Zorita y Cabanillas del Campo (día 3), Beleña del Sorbe (4 de febrero); así como Peñalver y Puebla de Beleña el día 5; o disfrutar el día 18 de las botargas y mascaritas de Almiruete, los diablos y mascaritas de Luzón, las vaquillas de Membrillera, la 'cencerrá' de Riba de Saelices o los vaquillones de Robledillo de Mohernando. Cita también ese día en Salmerón, Valdesaz, Villares de Jadraque y Zarzuela de Jadraque.

Continúa el recorrido el día 19 en Luzaga con sus vaquillas y diablo, y en Ribarredonda; para dar paso el día 22 a los chocolateros de Cogolludo, y el día 25 a la vaquilla de Anquela del Ducado y al Tío Tararura y el toro de carnaval de Romanones.

Con el final del invierno el calendario de botargas se espacia y ya no será hasta el mes de abril la nueva cita, en Yélamos de Abajo, que tendrá sus dos salidas los días 5 y 6, Miércoles y Jueves Santo, recuperada en 2015 tras siglo y medio de parón.

Por su parte en el mes de julio será el turno de las botargas de Hita (el día 1) y la de Muduex (el 22), mientras que el 12 de agosto vivirá su segunda salida la botarga de Beleña de Sorbe, un día antes que la botarga de Aleas.

Finalmente los días 2 y 3 de septiembre cierra esta Ruta de las Botargas la de Majaelrayo, en la que recorre la localidad dirigiendo al grupo de danzantes, siendo también su misión vigilar que nadie se duerma durante la celebración de las vísperas en la iglesia.

Tradiciones ancestrales y fiestas populares que invitan a recorrer Guadalajara siguiendo los pasos de las botargas: personajes, colores y sonidos esenciales en el folclore de la provincia.