En medio de la polémica por la retirada del busto de Juan Carlos I en el Ayuntamiento de Barcelona, sale a la luz ahora que la Diputación de Toledo se gastará 4.719 euros en la realización de una efigie del Rey Felipe VI. Una decisión que se tomó el pasado 15 de mayo, unos días antes de la celebración de las elecciones. Es decir, cuando el ‘popular’ Arturo García-Tizón presidía todavía la institución.
Según explica La Tribuna de Toledo, la Diputación Provincial de Toledo pretende corregir así “la carencia de representaciones de la efigie del Rey Felipe VI en las dependencias de las sesiones del Pleno, tal y como obliga el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales”.
En este sentido, la resolución acordada en ese momento por García-Tizón afirma que “visto que actualmente la Diputación Provincial de Toledo carece de retratos de Su Majestad Felipe VI adecuados para dar cumplimiento a la disposición, es necesario cubrir mediante la adquisición de una efigie”.
Por otra parte, el escultor toledano Luis Martín de Vidales fue el que presentó un presupuesto de un montante de 4.719 euros para la elaboración de la escultura de la efigie del Rey de un tamaño levemente superior al natural y fundido con la técnica de la cera perdida, con repasado y patinado de bronce. La pieza mencionada, adjudicada recientemente por la Diputación Provincial de Toledo mediante un contrato menor de suministro, se colocará sobre una base de madera de fresno, por lo que la obra medirá 1,30 metros de altura por 60 centímetros de frontal y 45 de fondo. De esta manera, las sesiones plenarias de la institución provincial contarán ya con una representación escultórica del monarca español.
