La Diputación de Albacete aprobó la semana pasada los presupuestos que esta institución tendrá para 2016, entre los que se encontraba una polémica partida presupuestaria de 75.000€ destinada a la Escuela Taurina de Albacete. Este presupuesto, aprobado con los votos favorables del PSOE, Ciudadanos e Izquierda Unida, ha sido duramente criticado por diferentes asociaciones animalistas.
Concretamente, la Fundación Alma Animal y La Tortura No Es Cultura han denunciado “la incapacidad de los gobernantes para avanzar hacia lo que la mayoría de la sociedad demanda” y han pedido tanto a la Diputación como al Ayuntamiento, que también subvenciona a la escuela con 68.000€ de los presupuestos municipales, que dejen de financiar con dinero público la financiación del maltrato animal.
En este sentido, ambas asociaciones han denunciado que la Diputación mantenga dicha financiación por tercer año consecutivo, a pesar de la entrada de los socialistas en el equipo de Gobierno. Además, han pedido que tanto la Diputación como el Ayuntamiento de Albacete sigan los ejemplos de ciudades como Nájera, Caravaca de la Cruz o Cáceres, que han retirado su financiación a los festejos taurinos para destinarlo a libros o eventos culturales.
Igualmente han cargado contra el Partido Popular, que a pesar de haber votado en contra de los presupuestos, hizo una férrea defensa de las subvenciones a la escuela durante el pleno de esta institución provincial.
En la misma línea, los colectivos animalistas se quejaron por las redes sociales de que la Diputación de Albacete destine más dinero a la escuela de tauromaquia que al Plan de Igualdad, que solo recibirá una partida de 24.000€, lo que supone una diferencia de 51.000€ con respecto a lo que recibe el centro taurino.
La popularidad de la tauromaquia se desploma
Para terminar, las dos asociaciones recurrieron a algunos datos publicados por diversos estudios que dejan claro la destacable caída de la popularidad de este tipo de festejos en el país. Como refleja una encuesta de Ipsos Mori, el apoyo de los españoles ha descendido de un 30% a un 19% en menos de tres años. El estudio también revela que un 84% de los jóvenes “se avergüenza de vivir en un país con toros”.
