Un cementerio de barriles de cerveza invade el centro de Toledo para pedir ayudas directas a la hostelería

Un cementerio de barriles de cerveza invade el centro de Toledo para pedir ayudas directas a la hostelería
 Imagen de la plaza Zocodover, en Toledo, durante la protesta realizada por los hosteleros para exigir ayudas directas al sector. FACEBOOK
photo_camera Imagen de la plaza Zocodover, en Toledo, durante la protesta realizada por los hosteleros para exigir ayudas directas al sector. FACEBOOK

TOLEDO.- Los hosteleros de la provincia de Toledo han vuelto a salir este jueves a la calle para reclamar ayudas directas y a fondo perdido, al tiempo que mostrar su rechazo al código QR para el sector al considerar que con él se les "criminaliza". Una protesta en la que han dejado los platos rotos con los que protestaban hace una semana, para convertir la céntrica plaza de Zocodover en un cementerio de barriles de cerveza.

Barriles en los que han colgado esquelas en memoria de sus terrazas, de los café-teatro, las discotecas, los hostales, las cafeterías, las tabernas o los salones de eventos, todos ellos como "víctimas" del abandono por parte de las administraciones públicas.

Una acción con la que la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo ha querido visibilizar esa situación a la que aseguran estar siendo sometidos, y a la que invitaban a sumarse a todos los hosteleros de la provincia, llevando hasta la plaza las esquelas de sus propios establecimientos, las mismas que desde hace días cuelgan en sus puertas.

Un "cementerio hostelero" con el que han protestado por una reapertura que consideran "insuficiente", con un aforo limitado a un tercio en el interior de los establecimientos y sin servicio de barra.

A ello suman en sus reivindicaciones la situación de cierre en la que siguen los bares y restaurantes de Casarrubios del Monte, Fuensalida y Torrijos, los tres municipios toledanos que aún permanecen en nivel 3 reforzado debido a la situación sanitaria.

En este sentido, el presidente de la asociación, Tomás Palencia, ha subrayado que el sector se siente "abandonado" después de casi un año "con muchas restricciones": cierres continuos y bajadas de facturación, teniendo que soportar las cargas sociales y económicas de una empresa.

Por ello aseguran no tener "más remedio" que volver a salir a la calle para reclamar ayuda, puesto que "nos tienen que indemnizar", afirma Palencia.

Así, los hosteleros toledanos han pedido "ayudas directas" para poder sobrevivir, puesto que las recibidas hasta ahora "son totalmente insuficientes". De este modo han exigido "ayudas específicas al sector", tal y como se está haciendo en otros países como Francia o Alemania.

A este respecto, el vicepresidente de la asociación, quien también es vicepresidente de la federación regional de los hosteleros, Alfonso Silva, ha vuelto a calificar la situación de "dramática", por lo que reclama de forma "urgente" un plan de ayudas directas a fondo perdido.

Respecto al código QR, Palencia ha asegurado que "es fácil de utilizar", pero ha recordado que fue una medida que se puso sobre la mesa para evitar el cierre del ocio nocturno, el cual, sin embargo, "lleva cerrado un año". Consideran que "ahora no es el objetivo", por lo que ven en la decisión del Gobierno regional una forma de "criminalizar" a un sector que "es de los que más restricciones tiene".

En este sentido el responsable de Ocio Nocturno en Toledo y miembro del comité ejecutivo de la asociación, Víctor Carrillo, ha considerado que este cementerio refleja "la situación del sector", para el que pide "un plan de rescate".

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