A juicio un policía local de Albacete por asesinar a un hombre por deudas de drogas y tirar su cadáver al Júcar

Los hechos se remontan a 2017, cuando el acusado mató a la víctima, a la que adeudaba 1.900 euros, golpeándole con un objeto metálico. La Fiscalía pide 15 años de prisión para el agente y otros tres a su primo, que le ayudó a deshacerse del cuerpo.
Efectivos de la Policía Nacional realizando un registro del coche de 'El Chule', el policía local de Albacete acusado de asesinar a Jairo Arcos. ARCHIVO
photo_camera Efectivos de la Policía Nacional realizando un registro del coche de 'El Chule', el policía local de Albacete acusado de asesinar a Jairo Arcos. ARCHIVO

ALBACETE.- El próximo lunes siete de junio dará comienzo el juicio contra 'El Chule', el policía local de 55 años de Albacete acusado del homicidio de Jairo Ronald Arcos, al que presuntamente habría matado por una deuda de drogas, y para quien el fiscal pide unos quince años de cárcel y otros diez más de libertad vigilada.

En el banquillo de los acusados se sentará también J.P.R., primo del procesado, y para quien el Ministerio Fiscal pide tres años de cárcel por un presunto delito de encubrimiento, ya que está acusado de haber ayudado a su familiar a deshacerse cuatro días después del cadáver, que lanzaron desde un puente al río Júcar.

El juicio se celebrará en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Albacete durante dos semanas, y contará con la presencia de un jurado popular. El fiscal le ha acusado del delito de homicidio al entender que el consumo esporádico de cocaína del acusado "no le afectaba de ningún modo a sus facultades mentales".

En los días en que la víctima estuvo desaparecida su familia movilizó recursos para su búsqueda, puesto que salió una noche de su domicilio, dejando solos a sus hijos menores, a quienes dijo que regresaría pronto, pero ya no volvió.

Según el escrito de acusación, los hechos se desarrollaron sobre las 22.38 horas del viernes 15 de septiembre de 2017 en la capital provincial, cuando el policía local recogió a su camello en el punto donde habían quedado para hablar de cómo el acusado, que le compraba cocaína de manera intermitente, iba a saldar la deuda de 1.900 euros que tenía pendiente con él.

La Fiscalía expone que ambos fueron al trastero del domicilio del acusado, donde le ofreció varios objetos como pago de la deuda, oferta que la víctima rechazó al querer solamente el dinero. Mientras Jairo Arcos, de 36 años y nacionalidad colombiana, se alejaba para marcharse por el pasillo, el policía cogió un atizador de hierro y le golpeó en la cabeza, muriendo la víctima en el acto al causarle un traumatismo craneoencefálico.

Una vez cometido el homicidio, el agresor envolvió el cuerpo en mantas y plásticos y lo dejó en el interior del trastero. Sobre las 23.15 horas de la misma noche, el padre de la víctima comenzó a recibir llamadas de sus nietos, avisándole de que su padre se había ido y todavía no había regresado.

Con el paso de los días, los vecinos se quejaron del hedor que desprendía el trastero, por lo que 'El Chule' pensó que tenía que deshacerse del cuerpo. El policía local le contó lo sucedido a su primo, que le ayudó a la hora de destruir las pruebas que implicaban a su familiar en el delito.

Así, la noche del martes 19 de septiembre de 2017, ambos cargaron el cadáver en el coche y se dirigieron al paraje de Maldonado, donde se subieron a un puente desde el que arrojaron el cadáver al río Júcar.

Por la tarde del día siguiente, un vecino de la zona avistó el cuerpo de la víctima flotando en el agua, avisando a dos vecinos que llamaron de inmediato a los servicios de emergencias de Castilla-La Mancha.

'El Chule' llegó a reconocer el crimen ante la Policía Nacional tras su detención, vinculándolo a la deuda que había acumulado con Jairo Arcos por las drogas. Sin embargo, en el juzgado de instrucción se acogió a su derecho a no declarar. El acusado lleva desde entonces en prisión preventiva.

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