GUADALAJARA.- La ciudad de Guadalajara da un paso más en materia de memoria democrática y este martes ha materializado el cambio de nombre de cinco de sus calles, dedicadas hasta ahora a personas vinculadas al golpe de estado franquista de 1936 y que a partir de ahora llevarán nombres de mujer.
Una iniciativa acordada por el pleno municipal durante el anterior mandato que ahora se materializa, retirando así las "posiciones de honor" a los golpistas.
De este modo, cambian su denominación la calle del General Moscardó Guzmán, que pasa a ser la calle Brianda de Mendoza y Luna; la calle de los Hermanos Ros Emperador, que ya es la nueva Aldonza de Mendoza; la travesía de los Hermanos Ros Emperador, que desde hoy está dedicada a Gabriela Mistral y la calle de Fernando Palanca, que cambia su nombre por el de Margarita Salas.
Junto a estas cuatro calles, la plaza del Capitán Boixareu Rivera pierde también esta denominación, y pasa a convertirse en dos calles. Así, la parte que discurre entre la plaza de Santo Domingo y la glorieta de Bejanque -conocida hasta ahora como calle Boixareu Rivera- pasa a denominarse calle La Carrera -como ya se la denomina popularmente-, y el resto de la plaza, el perímetro restante al parque de la Concordia, pasa a ser la calle de María Pacheco.
Nuevos nombres que, salvo La Carrera y María Pacheco, han sido elegidos mediante una encuesta ciudadana realizada a partir de una propuesta inicial de veinte nombres de mujeres en la Historia confeccionada por un comité de expertos académicos.
Un cambio de nombres que ha pasado hoy del papel a la calle, con la retirada de las placas con nombres de los golpistas y su sustitución por las nuevas.
Un acto al que han asistido varios miembros de la Corporación municipal, encabezados por el alcalde, Alberto Rojo, quien se ha referido a este cambio como "un acto de justicia, de concordia y de normalización democrática". Un gesto, ha considerado el regidor, que "ayuda a cerrar heridas y a pasar página sin caer en el olvido".
Y es que para Rojo, "una ciudad decente no puede dedicar calles a quienes dieron un golpe de estado para llevarnos a una dictadura", por ello con esta retirada de sus nombres del callejero guadalajareño, lo que se hace es "retirarles una posición de honor".
Pero el alcalde no se ha olvidado de quienes "nos tienen acostumbrados a cierta polémica en torno a la memoria democrática", recordando que "nadie imagina" una calle dedicada "a un terrorista, a Hitler o a personas vinculadas al nazismo en Alemania".
Por último, ha pedido a las personas afectadas por estos cambios en el callejero "paciencia", al tiempo que se ha disculpado por las molestias ocasionadas y ha recordado la disposición del Ayuntamiento para ayudarles.
Vecinos y empresas de estas calles a las que en los últimos días el Consistorio se ha dirigido mediante carta para informarles sobre la nueva denominación de sus vías y detallarles un listado de las instituciones, organismos y empresas que efectúan de manera automática las modificaciones en la dirección a instancia del Ayuntamiento, así como aquellas que atendiendo a la ley de Protección de Datos se considera que el cambio debe ser solicitado por cada persona afectada.
Cambios que suponen un coste de 2.000 euros, señala el Consistorio, por lo que a partir del próximo lunes los negocios afectados por las modificaciones que deban hacer en sus rótulos, tarjetas de visita, coches de empresa o páginas web podrán solicitar ayudas de hasta 600 euros para compensar dichos gastos.
Tras atender a los medios, el alcalde y la segunda teniente de alcalde, Sara Simón, hacían entrega a los operarios municipales de las dos primeras nuevas placas en instalarse, las correspondientes a las calles María Pacheco y La Carrera.
Nuevas denominaciones que llevan las placas metálicas que, de manera provisional, se han colgado en las calles céntricas y que serán sustituidas en las próximas semanas por otras de acabado "más estético", acorde al casco histórico, según ha informado el Ayuntamiento.
