TOLEDO.- Castilla-La Mancha refuerza las restricciones en los hospitales ante la escalada de contagios por covid-19 en la comunidad autónoma, que en plena sexta ola cuenta con una incidencia acumulada a 14 días de 302 casos por cada 100.000 habitantes.
Debido a este aumento de positivos, se han suspendido las visitas a los enfermos en todos los centros hospitalarios de Castilla-La Mancha, permitiéndose además solo un acompañante familiar por paciente ingresado, con la finalidad de reducir el flujo de personas en los hospitales.
Por el momento ha trascendido que las áreas sanitarias de Toledo y Albacete ya han limitado estas visitas a los pacientes de sus hospitales y se han pospuesto las prácticas impartidas a los alumnos de Ciencias de la Salud.
En el hospital de la capital castellanomanchega también se han restringido los acompañamientos, contemplándose solo en los supuestos en los que el ingresado sea un menor de edad, una mujer en proceso de parto o una persona dependiente que requiera de ayuda constante, que podrán estar con un familiar.
Del mismo modo, los pacientes del centro toledano también tendrán que asistir a las consultas sin un acompañante, de nuevo con la excepción de menores y dependientes.
Por su parte, la gerencia de Albacete ha ampliado horarios de los puntos de atención continuada, ha reforzado la plantilla de enfermeros y de profesionales administrativos en los centros de salud, y ha recuperado los circuitos respiratorios para mejorar los triajes de casos sospechosos.
Estas medidas se contemplan en las instrucciones del Sescam relativas a las visitas y acompañamientos durante la pandemia, aprobadas por la Administración autonómica el 30 de junio de este año, así como en los planes de contigencia de los distintos centros hospitalarios.
En las directrices se especifica los acompañamientos y las visitas pueden ser de una persona por paciente cuando la situación sea de "nueva normalidad", es decir, la región se encuentre en riesgo bajo o medio.
Sin embargo, en el documento de la Consejería de Sanidad se añade que cuando la situación es de riesgo alto o muy alto -por encima de los 300 casos- "quedan prohibidas las visitas y el acompañamiento será de una persona por paciente".
También se especifica que, cuando la situación pase a ser de riesgo alto, se prohíben las actividades organizadas por parte de entidades de voluntariado en todos los centros sanitarios.
