TOLEDO.- El presidente del Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales de la provincia de Toledo, Rafael Martín, ha subrayado hoy la importancia de la colaboración ciudadana en la recogida selectiva de residuos orgánicos, de cara a su posterior tratamiento.
Así lo ha señalado durante la visita que ha realizado a la localidad toledana de Bargas, donde junto a la vecina Olías del Rey, se está desarrollando el proyecto piloto para la implantación del contenedor marrón, destinado a la recogida selectiva de biorresiuos.
Una iniciativa que está en marcha desde el pasado lunes en ambas localidades, cuyas alcaldesas, Isabel Tornero y Charo Navas, han acompañado al presidente del Consorcio y al gerente de Gesmat, Pablo Redondo, en la visita que ha realizado tanto a uno de los mostradores en los que se lleva a cabo la campaña de información ciudadana como a una de las islas en las que ya se encuentra funcionando el quinto contenedor.
Martín ha explicado que se han elegido estas localidades por su proximidad al Ecoparque de Toledo y por sumar entre las dos una población aproximada de 25.000 habitantes, lo que permitirá "hacer una serie de muestras significativas que nos sirvan para conocer datos a nivel provincial".
Este proyecto piloto servirá de modelo para la implantación de contenedores de residuos orgánicos en toda la provincia, es decir, aquel destinado a los biodegradables procedentes de jardines y parques; los alimenticios y de cocina procedentes de hogares, restaurantes, servicios de restauración colectiva y establecimiento de venta al pormenor, así como los originados en plantas de transformación de alimentos.
El diputado provincia ha explicado que "la intención es ver cómo funciona el quinto contenedor de residuos orgánicos en estos municipios, para luego utilizar todos esos datos de cara a la extensión de la recogida selectiva de los residuos orgánicos en toda la provincia".
En este sentido, Martín ha resaltado el impulso que desde el Gobierno provincial se está dando a un proyecto que supone una inversión de 9 millones de euros -6 procedentes de los FEDER y 3 millones del Consorcio, a través de la Diputación-, que contempla la construcción de una planta de tratamiento de estos biorresiduos, la instalación de contenedores marrones y camiones de carga lateral que los recojan en toda la provincia.
Asimismo ha agradecido la colaboración de los ayuntamientos de Bargas y Olías del Rey, así como de sus alcaldesas, para que este proyecto piloto "sirva de modelo para le resto de los pueblos de la provincia", permitiendo así avanzar en la recogida de la materia orgánica, que supone el 40 por ciento de los residuos totales producidos.
En el marco de este proyecto piloto se han instalado un total de 40 contenedores en Bargas y otros 35 en Olías del Rey, para que tres días a la semana (lunes, miércoles y viernes) se depositen este tipo de residuos. De este modo se pretende analizar "la colaboración ciudadana" de cara a decidir "las mejores opciones en la implantación futura de estos contenedores para la recogida de residuos orgánicos en el resto de la provincia".
Por su parte las alcaldesas han agradecido al Gobierno provincial y al Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales el haber elegido sus localidades para este proyecto piloto, al complementar este sus iniciativas en materia de medio ambiente y su compromiso con "las 3 R: reducir, reciclar y reutilizar".
Tornero ha destacado que Bargas "es un municipio que aboga por el reciclaje, pues somos conscientes de su importancia y la posibilidad de darle nueva vida a esos desechos que generamos en los hogares, lo que supone un gasto menor en el consumo de materias primas, algo fundamental para luchar por la salud del planeta", ha apostillado.
Respecto a Olías, su alcaldesa, Charo Navas, ha subrayado la "estupenda" acogida que ha tenido el proyecto piloto en el municipio. Una iniciativa que complementa las actuaciones medioambientales que se venían desarrollando desde la localidad, por lo que "estamos encantados de formar parte de este proyecto", ha sentenciado.
