CIUDAD REAL.- Castilla-La Mancha seguirá defendiendo "a ultranza" su modelo de servicios sociales y no está dispuesta a admitir "lecciones". Así lo advertido el jefe del Ejecutivo castellanomanchego, Emiliano García-Page, a algunos ministros del Gobierno de España que "no han gestionado una concejalía ni una jefatura de servicio" y que "a lo mejor no se han acercado en su vida a un centro social", pero que hoy tienen la necesidad de aparecer en los medios de comunicación.
Un mensaje dirigido a la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, quien considera que "la primera obligación" que tiene es reconocer y programar el abono de la deuda de Dependencia que tiene el Gobierno central con las comunidades autónomas. "Todo lo demás tiene que ir después", ha subrayado Page, y ese "todo lo demás es poner en riesgo la supervivencia y sostenibilidad e lo que hemos creado".
De este modo se ha pronunciado en la localidad ciudadrealeña de Manzanares, durante la inauguración de la rehabilitación llevada a cabo en 'Casa Josito', un centro que alberga los servicios sociales.
Allí ha recalcado que, más allá del "respeto" hacia los debates sobre otras cuestiones que algunos quieran tener -ha señalado en referencia a la petición de uno televisado sobre fiscalidad por parte del presidente del PP regional-, él está "en cosas más mundanas, más elementales" para los trabajadores de servicios como los que acoge esta renovada infraestructura. Y es por ello por lo que considera fundamental que desde el Gobierno de España se reconozca la deuda de 500 millones de euros en Dependencia que tiene con Castilla-La Mancha, porque de lo contrario -advierte- "estamos hablando de pan para hoy y hambre para mañana".
Considera así que quien no ha gestionado este tipo de servicios no puede intetar dar lecciones, algo que el Ejecutivo castellanomanchego no está dispuesto a permitir, por lo que se va a seguir defendiendo el modelo desarrollado en la región.
En este sentido, García-Page ha recordado que mientras otras comunidades autónomas han desarrollado cinco residencias, en Castilla-La Mancha se ha creado un centenar. "Tenemos más residencias de mayores que la Comunidad de Madrid con siete millones de habitantes", ha señalado a modo de ejemplo el presidente regional, por lo que "no nos son indiferentes las ocurrencias del ministro de turno".
Ha defendido así la necesidad de mantener "los miles de puestos de trabajo" que se están generando en el ámbito social sin recibir lecciones de nadie", pero va a ser imprescindible que "de una vez por todas" se hable del problema de la financiación del Estado.
Asimismo, García-Page ha subrayado que si bien ahora existen los fondos europeos, dentro de unos años "tendremos que bastarnos con nuestro dinero, no con el que viene de Europa", por lo que -ha advertido- "estoy en la obligación de que las cosas sigan funcionando en esta y en las siguientes legislaturas".
Durante la visita al centro, el presidente regional ha estado acompañado por la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano; el presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero, así como por la delegada de la Junta en la provincia, Carmen Teresa Olmedo, y el alcalde de Manzanares, Julián Nieva.
