TOLEDO.- La diferencia entre lo que ingresan unos y otros es un elemento clarificador de las desigualdades sociales. Una vez terminada la campaña de la declaración de la Renta 2020, la estadística de los declarantes pone sobre la mesa la realidad respecto al reparto de la riqueza en Castilla-La Mancha: los ricos lo son más y las rentas más bajas reducen sus ingresos medios.
Un problema de reparto de la riqueza, tal y como lo ha definido el sindicato CCOO, que hace crecer la brecha social. Y es que los declarantes con ganancias por encima de los 601.000 euros anuales han visto incrementados sus ingresos medios, tanto los procedentes del ahorro como del trabajo, pero sin embargo las rentas más bajas han percibido menos ingresos con respecto al año anterior.
En 120 se cifran las personas de la región con mayores rentas, las cuales declararon casi 39 millones de euros solo de ingresos del ahorro, lo que equivale a los ingresos medios del trabajo de más de 2.300 mujeres en la comunidad autónoma.
El número de ricos, no obstante, ha disminuido desde los 130 en 2019 a los 120 en 2020, pero en cambio sus ingresos son más altos, manteniéndose además muy por encima de los que había en 2018 que eran 83. La mayor parte de sus ingresos provienen de intereses y dividendos del ahorro, de media unos 340.000 euros, un cinco por ciento más respecto a 2019.
Mientras tanto, sus ingresos medios por rendimientos de trabajo también se han incrementado un 6 por ciento, pasando de 203.249 euros en 2019 a 215.830 en 2020, lo que supone una media de 12.581 euros más.
Por el contrario, en el resto de tramos de renta los rendimientos del trabajo han bajado o se han mantenido igual que en la anterior campaña. De esta manera, para el conjunto de las declaraciones, los ingresos medios del trabajo en 2020 se sitúan en 18.273 euros frente a los 18.355 euros de 2019, con una pérdida de 82 euros.
Y por género, los ingresos de los hombres alcanzan los 19.631 euros en 2020, menos que en 2019 que eran de 19.922, y los de las mujeres se sitúan en 16.229, más que en 2019 que eran 16.062 euros. La brecha entre hombres y mujeres se ha reducido en relación a los datos de la declaración de la Renta de 2020, pero es del 21 por ciento y sigue siendo muy elevada.
Ante estos datos extraídos de las declaraciones del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que permiten comparar los ingresos más altos con los más bajos, la secretaria regional de Políticas Sociales, Agenda 2030 y Empleo de CCOO, María Ángeles Castellanos, advierte que en Castilla-La Mancha existen "grandes diferencias de rentas, que son el origen de muchas desigualdades".
Para corregir estos "desequilibrios", cree Castellanos, hace falta una política fiscal más progresiva y el aumento de los salarios, para así poder hacer frente también al contexto inflacionista actual, en el que la región ocupa una de las más altas posiciones, si no la más alta, de todo el país.
