Page reivindica la "esencia" de la izquierda en la nueva financiación autonómica: "Ser independentista es ser muy facha"

El presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, este miércoles, en Puertollano. - D. ESTEBAN

El presidente de Castilla-La Mancha advierte que no le van a engañar con la "frivolidad" de la singularidad planteada desde el Gobierno de Pedro Sánchez, y vuelve a reclamar una política fiscal "progresiva y redistributiva".

CIUDAD REAL.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reivindicado este miércoles "la esencia" de la izquierda que pasa por una política fiscal "progresiva y redistributiva", basada en la igualdad de oportunidades y de derechos, por lo que ha criticado que se trate de vender que "lo más de izquierdas es ser independentista", puesto que "ser independentista no es solo ser muy facha, sino que además es de un egoísmo lamentable".

Así se ha pronunciado García-Page en la localidad ciudadrealeña de Puertollano, donde ha asistido a la colocación de la primera piedra de un polígono industrial, donde ha realizado una doble consideración, como presidente autonómico y como militante socialista respecto a la negociación del nuevo modelo de financiación y el planteamiento que se está haciendo desde el Gobierno de Pedro Sánchez, al defender la singularidad para Cataluña.

Un acto en el que el jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha aprovechado para volverse a manifestar en contra de que el Gobierno central negocie con Cataluña una financiación singular, al tiempo que ha subrayado que Castilla-La Mancha es, precisamente, una de las comunidades autónomas que se está viendo perjudicada por el actual modelo de financiación, el cual lleva una década pendiente de modificación.

Tras lamentar las acusaciones veladas, "y otras no tanto", que recibe sobre esta cuestión, el barón socialista ha denunciado que el independentismo que conoce es "de base económica", puesto que "quieren tener y mantener privilegios", pese a que "lo que tenemos es cosa de todos y todos nos necesitamos", ha apostillado.

Y es que, para García-Page, cuando se habla de financiación lo único que mueve a los independentistas es el interés económico, aunque ha advertido que "ni la soberanía nacional se alquila ni el interés del conjunto y la igualdad de los españoles se pone en venta".

No obstante, tras manifestar su admiración hacia Cataluña, el presidente castellanomanchego ha defendido que "no se puede separar de la esencia del país". "Todos hemos sido España siempre, desde que lo somos como país; no se puede trocear la riqueza nacional", ha añadido.

Por ello, después de estos años, "en los que se han cuestionado muchos valores, constitucionales y de muchos tipos", considera que "el remate" es "renegar de la esencia de la izquierda, que es dejar la igualdad de igualdad de oportunidades y de derechos, finalmente, para que cualquier territorio haga de su capa un sayo". "La riqueza es nacional, la soberanía es nacional y se debe compartir en clave nacional", ha sentenciado.

 

"No quiero caridad, ni las sobras; nadie las merece", ha añadido el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, quien ha advertido que no le van a engañar con la "frivolidad" de la singularidad, puesto que singulares son todas las comunidades autónomas, todas las provincias, cada municipio e incluso cada uno de los 47 millones de españoles.

Un discurso que "no va a colar", por lo que ha pedido que no se intente jugar con el lenguaje, porque en las necesidades en salud, educación o prestaciones básicas, que son las que gestionan las autonomías, "no hay singularidad".

Para García-Page, el planteamiento de que quien más aporte más reciba, "es muy de derechas", y ha advertido de que esta posición, llevada al extremo, supondría que quien más pague por el impuesto de la renta sería quien reciba más servicios públicos.

No obstante, ha defendido que los impuestos no los pagan los territorios, sino las personas y las empresas que viven en ellos, de forma que las comunidades autónomas reciben esos impuestos, o a veces los cobran. Para García-Page debe pagar más quien más tenga y "quien quiera defender otra cosa, probablemente debería hacérselo mirar".

Y ha sentenciado: "Lo único singular es el chantaje de quien quiere más y defender su egoísmo", el cual -ha advertido- "disuelve países y disuelve sociedades".