Con una bolsa de plástico tapando su cabeza y una bombona de gas conectada a un tubo de plástico, así era localizado muerto en el interior de un coche un hombre de unos 45 años. El vehículo se encontraba estacionado en la avenida de Europa de Toledo, en la vía de servicio de esta concurrida zona, justo frente a una de las puertas de acceso al Parque de las Tres Culturas, a la altura de la Delegación Provincial de Educación.
Precisamente fueron unos alumnos del próximo IES Universidad Laboral los que dieron la voz de alarma, en torno a las doce y media del mediodía. Inmediatamente se desplazaron hasta el lugar del suceso numerosos efectivos de Policía Nacional, que procedieron a acordonar la zona, levantando gran revuelo entre quienes pasaban por este punto neurálgico de la ciudad. Asimismo también se desplazaron hasta este punto miembros de la policía judicial y el forense para autorizar el levantamiento del cadáver.
El fallecido, según publica el diario ABC, trabajaba como celador en un hospital y en la hostelería. Aunque las investigaciones prosiguen, todo apunta a que podría tratarse de un suicidio. Según recoge este mismo medio, el gas que habría empleado este hombre para quitarse la vida sería dióxido de carbono, empleado en hostelería en su estado sólido (hielo seco), pero en forma gaseosa utilizado para generar efervescencia en diversas bebidas.
