El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha visitado hoy "en son de paz" los embalses de la cabecera del Tajo, los cuales se encuentran en una situación "dramática", ante la que ha reclamado un "verdadero" acuerdo nacional sobre el agua "con consenso" y no "un mal apaño" como ha sido el Memorándum.
Así lo ha señalado poco antes de su visita a Entrepeñas, durante la firma del convenio con la Mancomunidad Aguas del Sorbe (MAS) para la puesta en marcha de la conexión entre el embalse de Alcorlo y la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Mohernando. Un acto en el que Page ha lamentado que en España "nunca se ha arreglado bien" el problema del agua, ni con unos gobiernos ni con otros, por lo que ha criticado que sólo haya consciencia de que existe un problema hídrico en el país "cuando no llueve", tendiendo al olvido y la desaparición de esta preocupación cuando la situación mejora.
Y es que, ha recordado García-Page, el agua no sólo es una materia prima, sino el elemento indispensable para el empleo y el crecimiento económico. De ahí que ante la realidad que es ya el problema climático, haya instado a tomar "todos" conciencia de la grave situación, adoptando ese acuerdo a nivel nacional tan necesario.
Para ello ha pedido un cambio "drástico" y un replanteamiento, pensando en las generaciones venideras, "que tendrán un problema aún más agudo". En este sentido, el presidente de Castilla-La Mancha ha recordado que sigue pendiente de mantener una entrevista con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "para plantear muchas cosas, en primer lugar la defensa de los intereses de la región en inversiones e infraestructuras, pero también para alertar sobre la necesidad de un Plan Nacional del Agua en España".
En este sentido, García-Page ha reconocido que si tuviera responsabilidad política en Murcia y Valencia estaría "muy preocupado" por saber que la economía, la industria y la agricultura "dependen de un agua que no existe", y de existir es "a costa de las posibilidades económicas de la cuenca cedente". Ha pedido así de nuevo que se haga un uso "óptimo y preferente" de las desaladores, "en las que nos hemos gastado casi 600 millones de euros", ha recordado.
Durante su visita al embalse, el presidente de Castilla-La Mancha ha podido comprobar la situación en la que se encuentra Entrepeñas, a poco más del 14 por ciento de su capacidad. En concreto, son 114, 61 hectómetros cúbicos de agua embalsada los que hoy registraba este embalse de la cabecera del Tajo, frente a los 802 hectómetros cúbicos que como máximo puede albergar. Una situación que va empeorando día tras día, puesto que según los datos del SAIH, cada día se pierde un hectómetro cúbico de agua.
Una situación que se repite en el vecino embalse de Buendía, que ya se encuentra por debajo del 13 por ciento de su capacidad (12,86 por ciento) con un total de 210,59 hectómetros cúbicos de agua, de los 1.651 que podría albergar.
