CIUDAD REAL.- El exconcejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Ciudad Real y actualmente no adscrito, Pedro Fernández Aránguez, quien el pasado febrero negaba la violencia machista y se refería a las feministas como "sectarias que odian a los hombres", ha sido protagonista de nuevo en el pleno del mes de marzo. Esta vez por negarse a pedir disculpas y abandonar el salón de plenos de forma airada.
Única salida que encontró el polémico edil para no tener que escuchar cómo parte de la Corporación municipal pedía su reprobación por las manifestaciones vertidas en el pleno del pasado mes de febrero.
Una moción presentada por los grupos municipales de PSOE y Ganemos, a favor de la cual también votaba el edil de Ciudadanos, en la que se recogía la declaración del Consejo Local de la Mujer en repulsa contra las manifestaciones realizadas por Fernández, así como su condena tras definir a las personas feministas como sectarias que odian a los hombres y por "minimizar e invisibilizar la barbarie y magnitud de los datos de violencia contra las mujeres".
Por ello desde el Consejo Local de la Mujer se pedía que no se utilice políticamente la igualdad y la violencia contra las mujeres, un problema al que se debe dar "la importancia y relevancia que tiene".
Una declaración acordada por el Consejo en su reunión del pasado 26 de febrero, tras la propuesta presentada al respecto por una de las entidades que lo componen, y después de que Fernández Aránguez reafirmase sus palabras en una entrevista radiofónica.
De este modo en la moción se exigía a Fernández que rectificara sus palabras del 22 de febrero, a lo cual no daba tiempo puesto que el concejal no adscrito optaba por abandonar el pleno.
Momentos antes de marcharse del salón de plenos, Pedro Fernández tomaba la palabra para denunciar el "escarnio público" que según él se está realizando contra su persona, al haberse "tergiversado" sus palabras.
En este sentido, llegó a asegurar que sus polémicas palabras iban dirigidas a las "feministas radicales", por lo que considera que se ha articulado en torno a ellas una "burda manipulación", de ahí que se niegue a pedir disculpas.
"HARTO DE SER POLÍTICAMENTE CORRECTO"
No contento con ello, Fernández volvía a retratarse y afirmaba estar "harto" de ser "políticamente correcto". "No vamos a evolucionar hacia la igualdad hasta que no lo hagamos dentro de la figura del ser humano", defendía antes de marcharse apostillando que "no hay más desprecio que no hacer aprecio".
Tanto desde los grupos que presentaban la moción como desde de la oposición se reconocía lo "desafortunadas" de las manifestaciones de Pedro Fernández, aunque tanto el PP como el edil de Ciudadanos introducían también sus matices.
Así, desde la formación naranja su excompañero de filas, Francisco Javier Fernández Bravo –al que Aránguez calificó como "vago" y acusó de ser uno de los motivos de su salida de C's- rechazó las manifestaciones del concejal no adscrito, pero también aprovechó para criticar las formas empleadas por PSOE y Ganemos. En su opinión, la presentación de esta moción por la vía de urgencia representaba "una chapuza".
Por su parte desde el PP, justificaban su abstención en la votación, argumentando que lo que se había acordado era leer el texto aprobado en el Consejo Local de la Mujer y no presentar una moción. Una apreciación que recibía respuesta por parte de la portavoz de Ganemos, Nieves Peinado, quien afeaba a los populares que traten de "buscar excusas" para no asumir la declaración aprobada por el Consejo.
