Ecologistas rechazan un trasvase del Tajo a las Tablas y la Junta pide "remar juntos" para salvar el humedal

  • Desde la organización Ecologistas en Acción cuestionan la capacidad del Gobierno regional para hacerse cargo de la gestión de los parques nacionales y atribuyen a la política de "regadíos a ultranza" la situación de las Tablas de Daimiel.
  • El consejero de Desarrollo Sostenible apela a la suma de esfuerzos para hacer frente a la situación de "emergencia ambiental" en la que se encuentra el Parque Nacional.

TOLEDO.- Un nuevo frente se abre entre el movimiento ecologista de Castilla-La Mancha y el Ejecutivo regional, esta vez a costa del trasvase solicitado para las Tablas de Daimiel a través de la Tubería Manchega. Mientras desde la organización Ecologistas en Acción se pide a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente que se deniegue la derivación de agua solicitada, desde el Gobierno autonómico se insta a "remar juntos y sumar esfuerzos" para salvar el Parque Nacional.

La organización ecologista ve en la postura del Ejecutivo regional una muestra de su "nulo compromiso" con la recuperación del Parque Nacional y del río Tajo, cuestionando asimismo "su capacidad para hacerse cargo de la gestión de los parques nacionales".

En este sentido, desde Ecologistas apuntan en un comunicado cómo en las últimas semanas el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel ha vuelto a ser noticia "por su estado calamitoso y por las soluciones recurrentes" que demuestran "la nula actuación" de las distintas administraciones para acometer "una regeneración real".

Asimismo subrayan cómo ha sido "la política de regadíos a ultranza", la cual "aún se mantiene", la responsable de "la liquidación definitiva" del fenómeno más singular y espectacular de los humedales españoles, "la hidrogeología y sus múltiples manifestaciones que se reparte en muchos municipios de Castilla-La Mancha ligada al río Guadiana y complementada con las lagunas volcánicas del Campo de Calatrava".

Según Ecologistas, la desaparición completa de las lagunas fluviales, entre las que las llamadas Tablas de Daimiel eran un caso singular, "no tienen otra causa que la del descenso de los niveles freáticos de los acuíferos", siendo la razón de esto  "la sobreexplotación de los mismos para transformar una agricultura tradicional sostenible en un sistema de agroexplotación industrial insostenible".

La organización ha manifestado que espera del Gobierno de Castilla-La Mancha "una rectificación en sus planteamientos, que derive en un vínculo firme con el sentido común y con el cumplimiento de la legislación vigente y los compromisos internacionales".

Consideran que resulta del todo "irracional e insensato" que quiera "repercutir en un río exhausto y sobreexplotado como es el Tajo el coste ambiental de los déficits en el Guadiana, mientras que por otro lado, se alientan las regularizaciones de pozos y se mantiene una política agrícola que incentiva el incremento del consumo de agua".

Según Ecologistas, las Tablas de Daimiel ya están "extraordinariamente dañadas" y aunque una parte de su biodiversidad sea recuperable, "no lo debe ser a costa de provocar un daño igual o mayor en el Tajo".

Asimismo, añaden, el trasvase de agua "solo alentaría más sobreexplotación por parte de los regantes", que verían "otro grifo abierto a sus caprichos".

SUMAR ESFUERZOS

Sin embargo desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, ha sido el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, quien ha realizado un llamamiento a todos los colectivos a "remar juntos y sumar esfuerzos" para salvar el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, que se encuentra en una situación de "emergencia ambiental", con menos del cinco por ciento de su superficie encharcada, de las más de 1.750 hectáreas que integran el parque.

Así lo ha señalado el consejero en declaraciones a los periodistas antes de comparecer en la comisión de Economía y Presupuestos de las Cortes, respondiendo a preguntas sobre las críticas de Ecologistas en Acción y los Municipios Ribereños por la solicitud de trasvase desde el Tajo.

El consejero ha apelado a la situación "excepcional, de emergencia ambiental" en que se encuentra el humedal, y ha recordado que la comisión de gestión del parque se reunió hace dos semanas para tomar medidas.

Ha pedido "ser sensatos y reconocer la situación de excepcionalidad", y ha indicado que en el plan de uso y gestión del parque se habilita una propuesta de desembalsar agua a través de la Tubería Manchega para destinar al humedal en casos excepcionales.

No obstante, ha añadido que habrá que esperar a las precipitaciones de estos meses para ver si se activa esa medida excepcional.

Escudero ha afirmado que la posición del Gobierno regional respecto al trasvase Tajo-Segura es muy clara así como su defensa de los intereses de Castilla-La Mancha y de los pueblos ribereños, de hecho, ha recordado que han encargado una auditoría para ver cuánta agua del trasvase puede haber contribuido al desastre ambiental en el Mar Menor.

Ha pedido diferenciar los trasvases mensuales desde la cuenca del Tajo a la del Segura, a los que el Gobierno de Castilla-La Mancha se opone, de una derivación puntual para salvar las Tablas, porque "no es lo mismo".

Este es un "caso de urgencia y emergencia en las Tablas" y ha dicho que cualquier persona sensata aspiraría a que este humedal de gran valor ecológico se pueda preservar y para ello es necesario que se adopten medidas como una derivación puntual desde el Tajo.

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