ALBACETE.- Preservar la riqueza vegetal castellanomanchega, sirviéndose para ello de actuaciones en el hábitat y la flora silvestre amenazada, así como conservar las semillas de estas especies, son los pilares sobre los que se asienta el proyecto para el desarrollo de la Red de Recursos Genéticos de Flora Silvestre Amenazada y Protegida de Castilla-La Mancha.
Una iniciativa en la que esta semana se ha dado un paso más con la firma de un convenio entre el Gobierno regional y el Ayuntamiento de Albacete para sentar las bases de la futura Red. Un acuerdo que han rubricado el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, y el regidor albaceteño y presidente de la Fundación del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha, Emilio Sáez, mediante el cual este refugio de la flora en peligro "se convierte en el centro depositario preferente de material genético de flora protegida regional" y su Banco de Germoplasma en centro oficial de referencia en materia de recursos genéticos de flora silvestre amenazada.
Y es que, según detallaba Escudero, en Castilla-La Mancha se pueden encontrar más de medio millar de especies endémicas de la Península Ibérica, de las cuales "una treintena son exclusivas de la comunidad autónoma", por lo que su conservación "debe incluir la preservación de estos recursos genéticos".
Asimismo el consejero de Desarrollo Sostenible subrayaba que en estos momentos en los que el cambio climático amenaza con afectar a determinadas especies particularmente sensibles a la alteración de su hábitat, este convenio va a posibilitar la conservación de la riqueza vegetal y de su hábitat.
Por su parte el regidor albaceteño destacaba tras la firma que con este convenio se refuerza el proyecto puesto en marcha en 2007 desde la Fundación del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha para disponer de un Banco de Germoplasma Vegetal con el conservar semillas pertenecientes a especies de la flora silvestre amenazada de la provincia y de toda la región.
Así, Sáez recordaba que el Jardín Botánico no solo es "un museo vivo", integrado por colecciones de plantas vivas, sino que además dispone de este Banco en el que se conservan bajo condiciones controladas de temperatura y humedad alrededor de 1.500 muestras de semillas recogidas en estado silvestre, representantes de más de 600 especies de 70 familias botánicas, la mayor parte de ellas propias del territorio castellanomanchego.
Además, apuntaba el alcalde de Albacete, "el 60 por ciento de estas especies están incluidas en catálogos de flora amenazada o son endemismos ibéricos o iberonorteafricanos, de ahí la urgencia de su conservación".
Este Banco de Germoplasma Vegetal, recuerdan en nota de prensa desde el Gobierno regional, se puso en funcionamiento bajo la dirección de José María Herranz, catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha y director científico del Jardín Botánico, en cuyo equipo también participan el actual director general del centro, Pablo Ferrandis, y su conservador, Alejandro Santiago.
Tanto desde la Consejería como desde el Consistorio albaceteño se ha recordado que entre las funciones y objetivos del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha se encuentran la protección y conservación de especies amenazadas, colaborando para ello en proyectos de recuperación y refuerzo de poblaciones de flora. Intervenciones como las llevadas a cabo en el marco del proyecto 'Phoenix 2014', con especies en grave peligro de extinción como el pítano de la Mesa de Ocaña, el rabogato de la sierra de Abenuj, la mostaza de Alcaraz, la espuela de caballero y el tabaco de pastor.
Por su parte el banco de semillas de flora silvestre del Jardín Botánico ha tendio un papel fundamental para la realización de refuerzos poblacionales de taxones vegetales amenazados en sus hábitats naturales en el territorio de Castilla-La Mancha.
