TOLEDO.- Castilla-La Mancha prohibirá a partir del próximo 2 de mayo la realización de trabajos agrícolas, apícolas y forestales cuando el índice de propagación potencial (IPP) de incendios forestales se encuentre en niveles de riesgo muy alto o extremo, tras alcanzar un acuerdo con las organizaciones agrarias, las empresas cosechadoras y del sector forestal. Medidas temporales con las que se pretende reducir el riesgo de incendios en el medio natural, dadas las anómalas circunstancias de altas temperaturas y escasas precipitaciones de los últimos meses en la región.
Una resolución consensuada, que se publicará en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha el próximo martes, entrando así en vigor, y quedando suspendidas, con carácter general, para las zonas con niveles de riesgo muy alto y extremo, las autorizaciones concedidas para la quema de rastrojos o material vegetal en el medio rural; el uso de maquinaria y equipos cuyo funcionamiento pueda generar deflagración, chispas o descargas eléctricas en los montes y en las áreas rurales situadas en una franja de menos de 400 metros de masa forestal, aunque se han establecido "ciertas excepciones" a estas limitaciones que, en todo caso, precisarán de autorizaciones específicas.
Así lo ha señalado el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, tras una reunión mantenida con los representantes de las principales organizaciones profesionales agrarias, como UPA, Asaja-Apag, COAG, la Asociación de Empresarios de Máquinas Recolectoras (APEMA) y las asociaciones de empresas forestales ASEMFO y ASEFCAM.
Entre lo acordado, la prohibición del uso de cualquier tipo de maquinaria que pueda causar chispas o deflagraciones con IPP señalando riesgo muy alto, entre las tres y las seis de la tarde.
No obstante, se podrán realizar trabajos agrícolas, apícolas y forestales en nivel de riesgo muy alto "siempre que se cumplan las medidas establecidas" y se obtenga la autorización previa solicitud en las diferentes delegaciones provinciales de Desarrollo Sostenible. Solicitudes que se podrán realizar de forma telemática o presencialmente también las OCAs, OPAs, y en las ventanillas únicas de la Administración.
Medidas que se han pactado "tras meses de conversaciones y diálogo", alcanzando así un "acuerdo histórico para el sector" con el que afrontar un contexto meteorológico extraordinario en el que todos los agentes implicados, tanto la Administración como los profesionales del campo y del sector forestal ha colaborado en su diseño y aplicación "con una interlocución muy fluida".
En este sentido, el consejero ha destacado "la gran responsabilidad, el esfuerzo, la implicación y generosidad" de los representantes de todas las entidades. Una estrecha cooperación del sector agrícola y forestal para la definición de estas medidas de prevención cuyo objetivo es "garantizar la seguridad de los trabajadores del campo, de las cosechas y de las masas forestales, así como la protección del medio natural y del personal que lo protege".
Escudero ha precisado que las medidas adoptadas "responden a los escenarios de emergencia climática a los que nos estamos enfrentando en los últimos años, especialmente alarmantes en esta época del año, y que son fruto del acuerdo y la responsabilidad de todos los sectores implicados".
Durante la reunión, el consejero ha estado acompañado por el viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Marchán; el director general de Medio Natural y Biodiversidad, Félix Romero, así como por representantes del Cuerpo de Agentes Medioambientales de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Por último, Escudero ha recordado que desde el pasado 20 de abril ya están activados en extinción 108 medios, entre terrestres y aéreos, y más de mil bomberos forestales, lo que supone el 50 por ciento del operativo. Un dispositivo del Plan Infocam que está activo los 365 días del año, ha insistido el consejero, quien ha remarcado que en los próximos días se van a incorporar más medios aéreos, como helicópteros y aviones anfibios.
"Nos encontramos en una primavera anómala con una situación de sequía en gran parte de la región. Y en la medida de lo posible, debemos contribuir a minimizar el daño que está haciendo al campo y al monte la falta de precipitaciones. Por ello, todos y cada uno de nosotros debemos extremar las precauciones en el medio natural y en cualquier actividad ya que es tarea de todos prevenir los incendios forestales", ha concluido el consejero.
