CIUDAD REAL.- El último Pleno del Ayuntamiento de La Solana fue el escenario de un enfrentamiento abierto entre los ediles de Izquierda Unida y el Partido Popular. Tensión que acababa con la espantada de los seis concejales del PP del salón plenario al considerar que se les había faltado al respeto desde el grupo municipal de IU. Un abandono que el regidor solanero, el socialista Luis Díaz-Cacho, no consiguió evitar.
La polémica se producía cuando el Pleno del pasado martes estaba a punto de concluir y se debatía uno de los puntos del orden del día que, a primera vista, no apuntaba a ser conflictivo. Desde el equipo de Gobierno se había elevado una propuesta para mantener las oficinas del Registro Civil, ante la sospecha de que pudieran ser eliminadas en virtud de una ley aún sin aplicar.
Fue en su segundo turno de palabra cuando la concejal de IU, María Eugenia Díaz-Malaguilla, vinculaba este posible cierre de oficinas en el medio rural con los recortes del PP. "Este tipo de políticas de recortes se están llevando a cabo porque el Partido Popular está sentado donde está sentado por el apoyo del Partido Socialista", señalaba la edil antes de decir que "si le sumamos que la política del PP en muchos niveles se basa fundamentalmente en robar, expropiar, llevarse dinero a paraísos fiscales y robar de las arcas públicas, claro que me cuadra que sea otra morisqueta más para perjudicar al de la calle y seguir robando, que es lo que mejor se les da".
Unas palabras a las que no tardaba en reaccionar el concejal del PP, Jesús Labajo, pidiendo que constaran en acta dichas manifestaciones como una falta de respeto hacia la bancada conservadora.
Los intentos de la concejal de IU por precisar que se refería a las siglas nacionales del PP fueron infructuosos, puesto que desde las filas ‘populares’ su portavoz en el Ayuntamiento, Ana Belén Reinoso, volvía a insistir en la falta de respeto que se estaba cometiendo ante los seis ediles populares presentes en el salón plenario.
Entre las constantes interrupciones del PP, Díaz-Malaguilla recordó a los ediles del PP los casos de corrupción de "Madrid, Valencia, Murcia o Torrevieja". Algo a lo que Reinoso respondía volviendo a pedir una rectificación o una personificación tras argumentar que "en el Partido Popular no somos todos iguales".
En medio del revuelo suscitado el alcalde intervenía para llamar al orden, pero sin éxito. "Hemos sido capaces en muchos plenos y en situaciones más complejas de tratarnos con educación, sigamos tratándonos con toda la educación posible", señalaba Díaz-Cacho. Un llamamiento que, sin embargo, no tuvo el efecto deseado, puesto que mientras el regidor pedía a la secretaria que constaran en acta las palabras Díaz-Malaguilla, el grupo municipal ‘popular’ al completo se levantó y abandonó la sala como protesta.
Este episodio fue la guinda a un Pleno que, tal y como detallan desde el Ayuntamiento, estuvo marcado por constantes cruces dialécticos. Entre los asuntos abordados durante la sesión se encontraban cuestiones de relevancia para el municipio, como la aprobación de una modificación de crédito para dotar con medio millón de euros la urbanización del Parque Empresarial, que salía adelante con los votos de IU y la abstención de los populares.
Asimismo se aprobaba otra modificación, en este caso como suplemento de crédito, destinados a amortizar deuda del superávit de la última cuenta general, por un importe de 453.000 euros. Los votos a favor de PSOE y PP permitieron sacar adelante este expediente, de obligado cumplimiento legal. Los ediles de IU se opusieron.
