GUADALAJARA.- La declaración de Sigüenza y su entorno como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en la categoría de Paisaje Cultural podría ser realidad entre los años 2027 y 2028, un título que será fundamental para la promoción económica de la ciudad, que podrá tener así "circuito propio".
Un augurio que realizaba este viernes el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien asistía a la inauguración en la catedral seguntina de la exposición 'Atempora. Sigüenza 2022. Segontia. Entre el poder y la gloria' y al posterior vídeo mapping proyectado sobre la fachada del templo.
Una muestra que recorre 2.300 años de historia de la Ciudad del Doncel y su comarca, desde los remotos orígenes en la Edad del Hierro, bajo el nombre de Segontia, hasta finales del siglo XVIII, fecha en la que se puso fin a su señorío episcopal. La exposición, organizada por la Fundación Impulsa y que podrá visitarse hasta el 11 de diciembre, forma parte de la amplia agenda de actos e iniciativas puestas en marcha de cara a la conmemoración en 2024 del IX Centenario de la Reconquista de Sigüenza.
Programación con la vista puesta también en la consecución de esa declaración como Patrimonio de la Humanidad de la candidatura presentada bajo el título 'Paisaje Dulce y Salado de Sigüenza y Atienza', que abre el reconocimiento a un territorio que abarca 219 kilómetros cuadrados entre Sigüenza, La Olmeda de Jadraque, Cincovillas y Atienza, quedando delimitado por el Barranco del Río Dulce al sur, y al norte por el entorno de la villa de Atienza.
Un territorio en el que no solo es destacable su patrimonio cultural, puesto que también cuenta con un importante patrimonio natural, como las salinas de Imón, que serán "parte determinante" en la consecución de esta declaración que será un revulsivo económico, turístico y cultural para la capital seguntina.
La candidatura ha recibido numerosos apoyos, entre ellos el respaldo de Felipe VI, que el pasado mes de marzo recibía en La Zarzuela a una representación de la corporación municipal, encabezada por la propia alcaldesa, María Jesús Merino, así como a miembros del consejo asesor del IX Centenario de la Reconquista de la ciudad y del consejo rector de la candidatura a la declaración por la Unesco.
