TOLEDO.- Los niños de catorce años van a poder seguir cazando en Castilla-La Mancha. Así lo ha decidido este jueves el Parlamento autonómico, en el último Pleno de la legislatura, con los votos del PSOE y PP, fracasando de esta manera la proposición de ley presentada por Podemos, a iniciativa de los colectivos Proanimal y Dejando Huella, para aumentar a dieciséis años la edad mínima para practicar la actividad cinegética en la región.
Un proyecto que ha defendido en la tribuna de oradores el diputado y portavoz del partido morado en las Cortes castellano‑manchegas, David Llorente, quien ha recordado que esta propuesta ya se planteó en 2018, cuando se aprobó en marzo de ese año la modificación de la polémica ley de caza impulsada en 2015 por el Gobierno de María Dolores de Cospedal, aunque también entonces fue rechazada por los parlamentarios socialistas y ‘populares’ que, en palabras de Llorente, "hicieron la pinza" y "se plegaron en favor de los intereses del lobby cinegético" a pesar de que "iban en contra del interés general y del interés de los menores".
En cualquier caso, la última negativa sí contradice en esta ocasión la sugerencia ‑adelantada por PeriódicoCLM‑ que realizó el pasado mes de noviembre el Defensor del Pueblo a la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, para elevar a 16 años la edad mínima para cazar, al considerar que mantenerla en 14 años supone un "riesgo objetivo" para los menores.
En aquella petición, el Defensor del Pueblo llegaba a asegurar que "la simple posibilidad de que un menor de edad pueda usar arma ya supone en sí mismo un riesgo, incluso aunque vaya acompañado de un adulto".
Unos argumentos sobre los que este jueves ha estructurado su discurso Llorente, quien además ha incidido en que 16 años es la edad con la que "el conjunto de la sociedad actual considera que una persona es mínimamente responsable", pues es cuando se puede "trabajar, contraer matrimonio o dar consentimiento sexual", mientras que en España con 14 años "no se puede ni siquiera conducir una motocicleta de la menor cilindrada". "Un arma de caza no es un juguete y aquí estamos hablando de niños", ha criticado el diputado de Podemos.
Igualmente, ha mostrado su malestar por "el falso argumento de que elevar la edad mínima para cazar supone un riesgo para el relevo generacional del sector", pues considera que "el declive del sector cinegético se viene produciendo desde hace décadas y no depende de con cuantos años se puede empezar a practicar esta actividad, sino que responde a cambios sociales, económicos y culturales, desde la creciente sensibilidad social contra el maltrato animal hasta la propia transformación del medio rural, donde han ganado importancia diversas actividades económicas y de ocio alternativas".
"Castilla-La Mancha no es la América de Donald Trump, ni la gente ha elegido a la Asociación Nacional del Rifle para gobernar", ha defendido el portavoz de Podemos justo antes de recordar que es el Estatuto de Autonomía el que tiene las competencias de caza, por lo que para elevar la edad mínima no es necesario ajustarse al reglamento nacional de armas, al ser éste de menor rango. De hecho, otras comunidades autónomas como Canarias o Galicia ya han dado el paso de aumentar a 16 años esa edad, en este último caso, siguiendo la recomendación del Defensor del Pueblo gallego y con el apoyo del PP de Núñez Feijóo.
Finalmente, Llorente ha defendido que con este incremento de edad se evitarían accidentes con armas de fuego en los que se ven afectados los menores de edad y ha recordado que en el último año han fallecido en España 28 personas por accidentes con armas de fuego relacionados con la caza. Un ranking que lidera Castilla-La Mancha, donde se acumulan cerca del 30 por ciento de todos los incidentes, según datos oficiales.
Argumentos que ha rechazado desde la bancada socialista la diputada Carmen Torralba, quien se ha escudado en que "es la normativa estatal la que permite que un adolescente de 14 años pueda obtener el permiso de armas" y que éste "no sirve solo para cazar, sino también para practicar deportes como el tiro al plato".
Asimismo, la parlamentaria del PSOE ha resaltado que las licencias "no se dan al tuntún", sino que "hay que pasar unos exámenes en los que se determina la aptitud del solicitante para ejercer la actividad cinegética".
Torralba ha defendido también la modificación de la ley de caza que realizó el actual Gobierno regional que preside Emiliano García‑Page, en la que, cabe recordar, se recuperaron los cotos sociales y se consiguieron importantes avances en aspectos como la defensa del uso público del monte, la conservación de la naturaleza y la protección del bienestar animal.
Progresos que ni entonces ni ahora han sido respaldados por el Partido Popular. En este sentido, la diputada conservadora Cortes María Roldán ha criticado la modificación de la ley de caza que realizó el Ejecutivo autonómico en 2018, porque a su modo de ver se hizo sin consenso con el sector e incluso va en contra del mismo, porque Page "se plegó a los intereses de cuatro animalistas".
"Es una ley mala para la caza, porque pone en peligro los 600 millones de euros que genera el sector. Es ley anticaza", ha sentenciado este jueves su intervención Roldán, para quien la propuesta presentada por Podemos "es un ataque frontal al modelo que defendemos: que el hijo salga a cazar desde joven acompañando a su padre".
Así, con dos únicos apoyos a la iniciativa ‑los de los dos diputados de Podemos en las Cortes‑, y con los votos en contra del resto de la Cámara regional ‑dieciséis del PP y quince del PSOE‑, la actividad parlamentaria castellano‑manchega toca a su fin esta legislatura.
