El Gobierno regional inicia la próxima semana los contactos con los grupos parlamentarios para desbloquear los presupuestos 

Si hay "voluntad" para aprobar los presupuestos de 2017, "no habrá piedra insalvable" en el camino, según el presidente del Ejecutivo regional. No está dispuesto a rendirse aunque el escenario sea difícil y apunta que de no salir adelante sería una "moción de censura encubierta". 

El Gobierno de Castilla-La Mancha no tira la toalla con los presupuestos de 2017 y confía en un no muy lejano "desbloqueo" presupuestario. Así lo ha apuntado el presidente del Ejecutivo regional, Emiliano García-Page, quien ha adelantado que la próxima semana se iniciará el contacto con los grupos parlamentarios para trasladarles la impresión obtenida durante las reuniones mantenidas con los distintos colectivos desde el rechazo del mes de abril, y plantearles su iniciativa al respecto. 

Una nueva oportunidad para este proyecto de presupuestos que considera aún es "posible" sacarlos adelante. Y es que Page no solo apela a la responsabilidad de los grupos parlamentarios, sino que él mismo no renuncia a su aprobación. "No concibo" la opción de "hacer un paréntesis" y pasar de largo como si no hubieran existido estos presupuestos 2017, asegura Page.  

Por ello confía en que se produzca esta vez "un debate exhaustivo", que lleve a su aprobación, y en el que "todo el mundo tenga la oportunidad de decir lo que no se dijo a la hora de echar atrás los presupuestos". Un proyecto, recordaba, que contemplaba 300 millones más que en 2016, fundamentalmente destinados a empleo, sanidad, educación y prestaciones sociales. 

Si no salieran adelante estos presupuestos, ha advertido Page, "estaríamos hablando de una forma de moción de censura encubierta o de tapadillo", puesto que el objetivo del Gobierno debe ser "hacer fácil la vida a los ciudadanos". 

Durante el mes de julio, y coincidiendo con el ecuador de la legislatura, desde el Gobierno se ha programado una serie de actos en los que uno a uno los miembros del Ejecutivo harán balance de gestión de estos dos años. Un periodo que confía coincida con "una solución al planteamiento presupuestario", ya que de lo contrario "se estarían cortando las alas al proceso de despegue" de la región. 

En este sentido, el presidente del Ejecutivo castellano-manchego insistía en que el proyecto de presupuestos que fue rechazado hace más de un mes era "el mejor de los últimos años", algo que en su opinión demuestra el hecho de que las enmiendas de PP y Podemos al mismo "no alcanzaban el 0,05%". 

"Si hay voluntad no hay ninguna piedra insalvable" 

De este modo, lo que hace falta para que salgan adelante estos presupuestos es "voluntad". "Si hay voluntad de sacar el presupuesto, no creo que haya ninguna piedra insalvable", algo en lo que –ha asegurado- se va a "empeñar". 

Dicho esto, García-Page también ha recordado que el presupuesto de 2017 era "coherente" con el del año pasado, del mismo modo que éste lo era con el discurso de investidura y a su vez con el pacto de gobierno. Por ello no está dispuesto a permitir que "se hable como si no hubiera habido un presupuesto pactado", puesto que el que tanto el PP como Podemos votaron en contra fue "pactado y ultimado", algo que para él representa un "faro fundamental". 

Al mismo tiempo también precisaba que no va a jugar con los intereses de miles de personas que están esperando estos presupuestos. "Hay muchas cosas en juego y tienen prisa", ha advertido, fundamentalmente en lo que se refiere a las ayudas a la gente más necesitada. 

Reconoce el presidente de Castilla-La Mancha que el escenario presenta "una enorme dificultad", que "habrá que hablar y discutir" también en su momento. Algo que está dispuesto a hacer incluso durante el mes de agosto si es preciso, puesto que aunque reconoce una "necesidad inmensa" de vacaciones, asegura estar dispuesto a no tenerlas". 

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