TOLEDO.- El Gobierno de Castilla-La Mancha estudia "seriamente" recurrir la no ratificación por parte del juzgado de las medidas restrictivas decretadas en las localidades de Alcázar de San Juan, Campo de Criptana y Membrilla en relación de la suspensión de salidas por parte de los mayores residentes en centros sociosanitarios.
Así lo ha precisado el director general de Salud Pública, Juan Camacho, durante la rueda de prensa que ha ofrecido en la Consejería de Sanidad, en Toledo, este martes.
Camacho ha subrayado que existe una "diferencia esencial" entre los autos de ratificación de las medidas especiales decretadas para controlar la transmisión de la COVID-19 en las localidades de Alcázar de San Juan y Campo de Criptana, y el de Membrilla.
En este sentido ha explicado que en dichos autos "no se rectifican medidas que ya han entrado en vigor", como es el caso de la prohibición de fumar en los espacios públicos, puesto que "ya están contenidas en el decreto 49/2020", aprobado el pasado viernes por el Consejo de Gobierno y que entraba en vigor la medianoche del sábado al domingo, "por el cual se modificaba el 24/2020".
Medidas que "ya están contenidas en el decreto", y que por lo tanto no hay por qué recurrir, al ser ya de aplicación tras estar contenidas "en una normativa de rango mayor".
Sin embargo otras cuestiones comunes a todos los autos que no han sido ratificadas por el juzgado, como la no apertura de parques y jardines, y la suspensión de las salidas de los residentes en centros de mayores, sí podrían ser objeto de recurso.
En este sentido Camacho ha señalado que, "desde el máximo respeto al poder judicial", sí se está evaluando "muy seriamente" la posibilidad de recurrir "al menos" la cuestión relativa a la limitación de las salidas de las residencias de mayores.
Y es que, ha subrayado el director general de Salud Pública, "el fin último de estas medidas que implantamos no es paralizar nada, no es dificultar la vida social de estas localidades", sino precisamente tratar de evitar aquellas actividades en las que se pueda producir un aumento de la transmisión del virus, limitando el acceso a aquellas zonas de "concentración o interacción en las que sea difícil mantener las medidas de seguridad"; pero también, y fundamentalmente, "evitar la afectación de las personas especialmente vulnerables".
Desde el Gobierno regional, con el "aprendizaje" que se viene adquiriendo desde el inicio de la pandemia, consideran que es su obligación "ser especialmente insistentes en esa cuestión".
"No queremos, bajo ningún concepto, poner en riesgo -más de al que ya de manera natural están expuestas- a las residencias y centros sociosanitarios", ha insistido Camacho, de ahí que se esté valorando recurrir este aspecto concreto de la no ratificación de las medidas especiales decretadas por el Gobierno regional para estos tres municipios ciudadrealeños.
LLAMAMIENTO A LA RESPONSABILIDAD
Por otra parte, el director general de Salud Pública ha vuelto a realizar un llamamiento a la responsabilidad de la población a la hora de poner en práctica las medidas decretadas para tratar de frenar la expansión del virus en la región.
"Podemos implantar, pensar y decidir, poner en funcionamiento todas las medidas que se nos ocurran y que parece que son adecuadas para mejorar el control de la pandemia, pero sin la responsabilidad de la población es absolutamente imposible llevarlo adelante", ha subrayado Camacho.
Y es que aunque es comprensible que después de seis meses sea "muy difícil" mantener la tensión, ha vuelto a hacer un llamamiento a "continuar con la autorresponsabilidad" puesto que "es la mejor herramienta en la lucha contra el virus".
Así ha invitado a "evitar las circunstancias de riesgo, mantener las medidas de prevención e higiene", así como atender "a las recomendaciones sanitarias", para seguir enfrentándonos a la pandemia.
