TOLEDO.- Nuevo episodio violento en un consultorio médico de la provincia de Toledo, en este caso a una enfermera del centro ubicado en Yuncos, a la que este lunes un usuario agredía verbalmente tras negarse a entregarle un material que según el protocolo no le correspondía. Una situación "intimidante y amenazante" que terminó con esta persona haciéndose por sus medios con el material que pedía.
Se trata de la quinta agresión a una enfermera en la provincia en los últimos seis meses, algo que desde el Sindicato de Enfermería (Satse) consideran "intolerable". Por lo que anuncian que identificarán "todas las fugas de seguridad" que se han producido en este caso, para evaluar su denuncia a los órganos pertinentes.
Tras condenar lo sucedido mientras que esta enfermera desarrollaba su trabajo en el consultorio local de Yuncos, señalan su rechazo a que los profesionales continúen sufriendo agresiones, ya sean físicas o verbales, cuando están trabajando para ofrecer la mejor atención sanitaria posible a los ciudadanos.
Cabe recordar que la última de estas agresiones en la provincia se producía hace apenas un mes, durante una atención domiciliaria en la localidad de Santa Olalla, cuando el paciente al que estaban atendiendo un médico y una enfermera, la emprendía a golpes con ellos.
Un episodio similar se vivía también a principios de año en otro municipio toledano, concretamente en Menasalbas, donde también se producía una agresión durante una atención a domicilio tras haber recibido un aviso.
Un tema en el que "ya se ha tocado techo", advierten, por lo que no están dispuestos a consentir que "la falta de medidas de prevención y contención deje a las enfermeras desprotegidas y en peligro en su puesto de trabajo", tal y como subraya la secretaria provincial de Satse Toledo, Gemma Torrejón.
Y es que, en España se producen al día alrededor de 55 agresiones a enfermeras y enfermeros, lo que supone más de 20.000 al año. Todo ello pese a las sucesivas campañas y actuaciones informativas, de concienciación social y profesional, puestas en marcha para reducir todo lo posible el número de agresiones físicas y verbales.
Incluso ya antes de la pandemia desde el sindicato se presentó de manera simultánea al conjunto de las administraciones públicas, tanto a nivel estatal como autonómico, así como a todos los partidos políticos, una propuesta de norma estatal contra las agresiones a los profesionales sanitarios, la cual -confían- "pueda ser una realidad lo más pronto posible".
TODOS LOS MEDIOS NECESARIOS
Una nueva agresión que condena también la Junta de Personal del Área Sanitaria nº1 de Toledo, desde la que muestran su "total apoyo y solidaridad" con la profesional agredida y muestran su rechazo a la "actitud violenta" por parte del usuario.
Consideran que "no existe justificación alguna" ante unos hechos "intolerables" que no hacen sino "socavar la asistencia sanitaria" que prestan todos los trabajadores de la Sanidad Pública de Castilla-La Mancha, al tiempo que "pone en claro riesgo su seguridad y salud".
Por ello, desde la Junta de Personal instan al Sescam a poner a disposición de todos los trabajadores a su cargo "todos los medios necesarios para garantizar su integridad física, seguridad y salud en el desempeño de sus funciones", que no son otras -recuerdan- que el cuidado de toda la población.
Asimismo instan a la ciudadanía a condenar y denunciar este tipo de actos, puesto que "van en contra de los intereses de todos", puesto que "si por una agresión perdemos un profesional, perdemos todos".
