TOLEDO.- Tensión en el PSOE de Toledo a escasos días de las primarias del 13º Congreso Provincial. El próximo sábado 2 de octubre, los socialistas están llamados a elegir nuevo líder en la provincia, y en esta ocasión cuentan con dos candidatos para optar al cargo: el presidente de la Diputación, actual secretario general provincial del partido y hombre de confianza de Emiliano García-Page, Álvaro Gutiérrez, y el teniente de alcalde de Noblejas, Ángel Luengo.
Dos aspirantes que tratan de aprovechar sus últimos recursos para convencer a los militantes de que su proyecto es el mejor para el futuro del partido y la provincia, aunque ahora una de las partes ha denunciado que no lo puede hacer en "igualdad de condiciones".
Un proceso en el que su Comité Organizador habría cometido "negligencia" al no cumplir los plazos marcados para formalizar y hacer públicas las candidaturas, impidiendo de facto la celebración de la campaña dirigida a la militancia.
Esto es lo que aseguran desde la candidatura de Luengo, que a través de un escrito ha pedido amparo a la Comisión Regional de Ética y Garantías para que intervenga sobre este proceso, lo paralice y se aplace la jornada de votación hasta el 9 de octubre, debido a la "dejadez manifiesta" de los organismos provinciales del partido.
De lo contrario, ha advertido Luengo, "se estará haciendo un flaco favor al espíritu democrático y justo que se pretende conseguir con la regularización de las primarias en la organización".
También lamenta la "inoperancia" de la Comisión de Ética y Garantías de Toledo a la hora de velar por los derechos de la militancia. Se da la circunstancia de que su presidenta, Esther Hernández, es concejala en el Ayuntamiento de Escalona, municipio donde Gutiérrez ejerce de alcalde.
Igualmente, el equipo de Luengo ha enviado una copia de su escrito a la Comisión Federal de Ética, así como a la Secretaría Federal de Organización, para pedir "auxilio", al desconfiar de "la estrecha relación familiar entre Álvaro Gutiérrez y el secretario de Organización de la Comisión Ejecutiva del PSOE de Castilla-La Mancha", su hermano, Sergio Gutiérrez.
De esta forma ha criticado que, pese a que las votaciones están previstas para este sábado, el Comité organizador aún no ha hecho pública la proclamación de las candidaturas, tal como prevé el artículo 185 del Reglamento federal que desarrolla los Estatutos federales.
Luengo, quien fue vicepresidente de la Diputación entre 2015 y 2019, en el Gobierno de quien ahora es su rival en las primarias socialistas, ha explicado que tampoco se les ha ofrecido un espacio físico en la sede provincial, ni otro en la página web de la formación. Además, no se les habría facilitado el envío de propaganda a la militancia y "hasta el momento no se ha puesto fecha al debate entre los candidatos", de carácter obligatorio según los reglamentos federales.
Del mismo modo, ha denunciado que el Comité organizador no ha informado sobre los centros de votación y la acreditación de interventores habilitados para las primarias, y tampoco se habría autorizado el voto telemático, pese a la gran dispersión entre los municipios de la provincia.
En definitiva, desde el equipo de Luengo opinan que el Comité organizador tiene una "voluntad clara y manifiesta de silenciar" el proceso de primarias, "sustrayendo a la militancia del derecho a la libertad de elección".
SIN PRIMARIAS EN 2017
Una opción de los militantes que no tuvieron hace cuatro años, cuando Álvaro Gutiérrez renovó su liderazgo al frente de la Secretaría General en un proceso que terminó realizándose por aclamación. En el camino se quedó la precandidata 'sanchista', Ángeles Calvo, al no conseguir los avales -obtuvo 458- necesarios para presentarse.
Entonces, los organismos provinciales del PSOE exigían un respaldo mínimo del 20 por ciento de los afiliados para celebrar las primarias, dificultando las aspiraciones de los candidatos.
El 'sanchismo' cambió las reglas del juego tras el último Congreso Federeal -el 39º-, regularizando las primarias en los reglamentos del partido y reduciendo el número de avales al 3 por ciento, lo que esta vez ha facilitado a Ángel Luengo -con 150 avales-, con menos apoyos que Calvo, disputar la Secretaría General del PSOE de Toledo.
