Algunos de los grafitis del acto vandálico en el abrigo de 'La Rendija', en Herencia (Ciudad Real). — P.E.P.A.

CIUDAD REAL.- Tras el atentado patrimonial sufrido hace un par de semanas, el Gobierno regional ha puesto en marcha los trámites para proteger el Conjunto de Abrigos Rupestres de 'La Rendija', situado en la localidad ciudadrealeña de Herencia.

Un conjunto de arte rupestre que fue víctima de los vándalos, que dejaron sus firmas y toda una serie de dibujos obscenos en las paredes de este abrigo rocoso, ocasionando un grave daño patrimonial.

Este jueves el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) ha publicado la resolución de la Viceconsejería de Cultura y Deportes por la que se da inicio al expediente para la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de Zona Arqueológica, este conjunto de tres abrigos conformados en el mismo estrato geológico en los que se conservan importantes manifestaciones de arte rupestre.

Representaciones de figuras humanas y animales en su mayoría, pertenecientes al arte esquemático, aunque también algunas con detalles naturalistas muy curiosos y originales, como dedos en las manos y en los pies o tocados diversos en la cabeza.

Pinturas que fueron puestas en conocimiento de la comunidad científica en el año 1990, en el marco de un simposio sobre la Edad del Bronce en Castilla-La Mancha organizado por la Diputación de Toledo, en el que José Almodóvar Romero, expuso los resultados de la investigación llevada a cabo a finales de los 80. No obstante, no fueron incorporadas al Inventario del Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha hasta el año 2005.

Para este conjunto, ubicado a unos 860 metros de altura, en la ladera sur del Cerro del Tocón, se propone un entorno de protección que ocuparía una superficie ligeramente superior a las 100 hectáreas. Se trataría así, recoge la resolución, de "limitar o controlar una hipotética actividad edificatoria en el supuesto de obras de nueva planta o infraestructuras de gran volumen", de modo que se garantizara por completo la contemplación e integración del conjunto en su entorno inmediato.

De este modo, una vez que sea declarado BIC, cualquier intervención que se proyecte realizar requerirá de autorización previa por parte de la Consejería competente en materia de patrimonio cultural con carácter previo a la concesión de la licencia municipal que fuese precisa.

Asimismo queda prohibida la instalación de publicidad, cables, antenas, conducciones o cualquier otro elemento que perjudique la adecuada conservación del inmueble o menoscabe la apreciación del bien dentro de su entorno, aunque sí estarán permitidos aquellos usos del mismo compatibles con su puesta en valor y disfrute patrimonial.

Por otra parte, y con el fin de preservar el paisaje histórico del conjunto de abrigos rupestres, salvo que lo autorice expresamente la Consejería, se evitará cualquier modificación de la topografía existente o la alteración del subsuelo, así como de los elementos accesorios tales como muros, cierres o caminos. No se autorizarán edificaciones, instalaciones o elementos tales como marquesinas o depósitos elevados que perturben el ámbito protegido.

La resolución establece también que dado lo que comporta la conservación de la zona arqueológica, el Ayuntamiento de Herencia deberá redactar un plan especial de protección para el área afectada.

Con la iniciación del expediente se activa de forma automática la protección para este conjunto, siendo así de aplicación provisional el mismo régimen de protección previsto para los bienes declarados de interés cultural, quedando sometido al régimen de autorizaciones y de protección previsto en la legislación de patrimonio cultural.

Durante un mes permanecerá abierto el período de información pública, para que todo el que tenga interés en el asunto pueda examinar el expediente y presentar las alegaciones que consideren oportunas.

Cabe recordar que, tras el ataque vandálico que sufrió 'La Rendija', la Plataforma Estatal de Profesionales de Arqueología (PEPA) criticó que la administración "nunca protegió y dio escasa difusión del patrimonio que albergaba" este abrigo rupestre.

Respecto a la declaración de BIC, este colectivo considera que "no es suficiente para proteger un yacimiento arqueológico" si no se acompaña de "programas educativos en los que incluya visitar y conocer estos lugares para que se genere un sentimiento de apropiación".