CUENCA.- La plataforma vecinal contra la instalación de la macrogranja de gallinas entre las localidades de San Clemente y Villarrobledo ha pedido la paralización de la tramitación del proyecto ante la expansión de la epidemia de gripe aviar en todo el país.
Desde el colectivo, integrado en la asociación Pueblos Vivos Cuenca, consideran una "irresponsabilidad" que el Gobierno de Castilla-La Mancha siga con los trámites que posibilitarán la construcción de esta explotación de ganadería industrial con más de un millón de gallinas de puesta de suelo, a pesar de la situación actual de expansión de gripe aviar H5N1 que está azotando España desde hace un mes.
En este sentido, la portavoz de la plataforma vecinal, Llanos Ortiz, considera "demencial" que ante esta situación que ha llevado a tener que sacrificar a más de 130.000 gallinas en una sola instalación, como ha ocurrido en Valladolid, "las autoridades no cuestionen ni suspendan la tramitación de este proyecto" que se convertiría en "la mayor explotación avícola de puesta del país y una de las mayores de Europa".
Y es que aunque "en las últimas semanas se ha especulado mucho sobre las macrogranjas en nuestro país, llegando a negarse su existencia por parte de representantes de diversos partidos políticos, promoviéndose bulos y generando confusión en la opinión pública", la realidad es que -prosigue- "si no existieran las macrogranjas, nohabrían tenido que sacrificar a más de 130.000 gallinas de golpe en una sola instalación".
Consideran que debería iniciarse el procedimiento de revisión de oficio de la Autorización Ambiental Integrada que fue aprobada por la Viceconsejería de Medio Ambiente de la Junta de Comunidades en 2019, ya que "el proyecto carece de plan de bioseguridad".
La plataforma, que cuenta con el apoyo de más de 40.000 ciudadanos y ciudadanas que, en tan solo un mes firmaron una petición para que se paralizara la tramitación, viene alertando desde el pasado mes de septiembre sobre la gran preocupación existente entre los vecinos debido a los riesgos que conlleva este tipo de explotaciones para su entorno rural, incluido el de zoonosis.
Y es que aunque el riesgo de transmisión a los humanos de la gripe aviar "es generalmente bajo", señalan cómo el pasado mes de enero se notificaba un caso de infección humana por el virus en Reino Unido, y hace dos meses la muerte de una mujer en China a causa de la variante H5N6.
Así, detallan que según un informe de la Organización Mundial de la Salud, en los últimos 18 años se han reportado un total de 863 casos de la variante H5N1 de gripe aviar, en 18 países, de los cuales 455 fallecieron.
Igualmente apuntan cómo el Ministerio de Sanidad apunta cómo en los dos últimos años se ha observado un incremento en la notificación de casos humanos esporádicos de gripe aviar, detectándose casi diez veces más en 2021 con respecto a años previos.
Apuntan del mismo modo cómo el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente considera que las explotaciones industriales de esta magnitud, con alta concentración de animales, propician la proliferación de este tipo de virus, y la propia Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria recomienda reducir la densidad de animales en estas instalaciones.
Desde la plataforma vecinal recuerdan que esta macrogranja de gallinas estaría ubicada cerca de zonas habitadas de Casas de Roldán, Casas de los Pinos y los Esteoss, todos ellos en la provincia de Cuenca, así como la pedanía de Villarrobledo Ventas de Alcolea, llegando incluso a estar a menos de 500 metros de numerosas viviendas de la zona.
Así, la plataforma, respaldada por la asociación Pueblos Vivos de Cuenca, manifiesta su disconformidad con la moratoria de las macrogranjas aprobada el pasado 13 de enero en las Cortes, por no incluir la ganadería aviar. Consideran "una falta de escrúpulos" el pretender hacer una instalación "tan descomunal" a escasos metros de viviendas habitadas, vulnerando así los derechos básicos del bienestar de los vecinos.
CONSECUENCIAS NEGATIVAS
Y es que, señalan, las consecuencias negativas que una instalación de estas características puede generar en el entorno rural son numerosas. Apuntan cómo el "desproporcionado" tamaño de la instalación, proyectada para 1.020.000 gallinas de puesta y 360.000 pollitas de recría, supone "una amenaza para la vida rural".
Una instalación que tendría un enorme impacto medioambiental, social y contra la salud de las personas, y que además no vela por el bienestar animal, contrariamente a lo que argumenta la promotora, señalan en el comunicado.
Desde la plataforma vecinal aseguran que en caso de producirse posibles brotes con potencial zoonótico en la instalación proyectada, "el sacrificio de animales, la logística, pérdida económica y los riesgos se multiplicarán por más de diez con respecto a la explotación de Valladolid recientemente afectada". De ahí el hecho de que carezca de un plan de actuación concreto genere "aún más desconfianza hacia la macrogranja" por parte de los vecinos.
Consideran "imperativo" que se defina, regule y ejecute en la región un Plan Estratégico de Ganadería intensiva, con normativas "detalladas, rigurosas y acordes a la escala de las explotaciones" y que además se valore "el impacto ambiental acumulado de la ganadería intensiva" en la región.
Por último recuerdan que la pandemia de covid-19 ha supuesto "un antes y un después" en los riesgos frente a posibles zoonosis, por lo que consideran se vuelve a poner en el punto de mira "el gran riesgo que supone este modelo de explotación aviar de gran escala".
