La expresidenta de Castilla-La Mancha se ha pasado por la Región de Murcia en medio de la campaña electoral, justo después de que el Gobierno central aprobase la autorización de un nuevo trasvase por el acueducto Tajo-Segura. Y todo esto a pesar de que el PP de Guadalajara ya ha anunciado que se manifestará en contra del nuevo trasvase.
La Región de Murcia es un caso especial, puesto que es el mayor beneficiado que los movimientos de agua de la cabecera del Tajo, y las plataformas ecologistas han denunciado en varias ocasiones los intereses especulativos que tienen los terratenientes murcianos.
Todo esto ha hecho que en Partido Socialista no hayan visto con buenos ojos la visita a Murcia de la Secretaria General de los Populares, que han calificado de “lamentable”. El diputado del PSOE, Fausto Marín, ha declarado en rueda de prensa que Cospedal “parece alegrarse del trasvase”. Marín también defendió el anuncio de Page para que los tres partidos con representación parlamentaria se unan en la defensa del agua de Castilla-La Mancha.
Ante estas palabras, los populares han decidido pronunciarse. La propia María Dolores de Cospedal ha criticado que se hable del agua “cada vez que llega una época electoral”. A pesar de la mediocre situación de los embalses del Tajo, Ha seguido atribuyendo las declaraciones del PSOE a fines electorales, y ha acusado a los socialistas de no querer hablar del trasvase cuando se firman los convenios para garantizar el agua en la región. Por su parte, la popular declaró que prefiere llegar a “acuerdos y convenios” sobre el agua.
De lado de Cospedal, el delegado del Gobierno central en Castilla-La Mancha, ha cargado contra Page asegurando que sus medidas son “fuegos de artificio”. Además, José Julián Gregorio ha echado la culpa de los actuales trasvases al PSOE, señalando que se podrían evitar estos trasvases si Barreda y Zapatero “no hubieran derogado el Plan Hidrológico Nacional”.
