En medio de un intenso clima de precampaña electoral, el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, ha aprovechado su viaje institucional a Lisboa para vaticinar que España va encaminada a tener un gobierno como el del país vecino tras el 26-J.
Concretamente, García-Page ha declarado en rueda de prensa que el Ejecutivo luso “lo está haciendo muy bien”, por lo que el Gobierno del Partido Socialista en Portugal, que cuenta con el apoyo del Bloco de Esquerda y de la Coalición Democrática Unitaria, conformada por los verdes y el Partido Comunista, “ofrece una perspectiva de lo que podría pasar en España en muy poco tiempo”.
En este sentido, el líder castellano-manchego del PSOE ha señalado que los seis meses de legislatura que lleva el Gobierno portugués ponen de manifiesto que “se puede avanzar desde una mayoría de izquierdas” y que, incluso en minoría parlamentaria, "se puede transitar buscando consensos en todas las direcciones".
Por otra parte, Page ha restado importancia a las últimas encuestas electorales que pronostican un ‘sorpasso’ de la coalición Unidos Podemos a los socialistas. Como argumento, el presidente autonómico ha recordado las encuestas que se realizaron en Castilla-La Mancha para las elecciones de mayo de 2015. “La mejor encuesta decía que el PSOE perdería 10 puntos y ahora soy presidente”, ha manifestado.
Por último, el dirigente castellano-manchego ha dicho que le parece muy difícil de prever que sumen suficientes votos y escaños el PP y Ciudadanos, por lo que si la derecha no consigue formar Gobierno por sí sola, “la única alternativa la podemos plantear desde una perspectiva progresista”, negando así cualquier posibilidad de un Ejecutivo de gran coalición con los ‘populares’.
Talavera, la plataforma logística y el AVE
Pero el presidente no estuvo solo en Lisboa para hablar del panorama político en España. El objetivo oficial de su viaje era impulsar algunos proyectos en infraestructuras, como la Plataforma logística en Talavera de la Reina y el AVE entre Madrid, Talavera y Lisboa.
Es por eso que se ha reunido con el ministro luso de Planificación e Infraestructuras, Pedro Marques, para tratar estos temas que afectan a la región, a pesar de que el Ejecutivo autonómico no posee competencias en ninguno de los dos proyectos.
Sobre el tren de alta velocidad, Page ha asegurado que no se iba a renunciar a él “a medio y largo plazo”, pero defendió que había que “acomodarse a los ritmos del Gobierno de Portugal”. En el país luso, la alta velocidad ha levantado cierta polémica y debate entre la población. El AVE no cuenta con gran popularidad en Portugal, donde sus ciudadanos prefieren dar prioridad al transporte de mercancías.
Sin embargo, Page ha asegurado que desde el Ejecutivo portugués hay un claro interés por el AVE Madrid-Talavera-Lisboa, sobre todo en lo relacionado a la financiación del proyecto mediante fondos de la Unión Europea, así como los beneficios que puede ofrecer en el sector del turismo.
De todas formas, al presidente de Castilla-La Mancha le “queda claro” que el proyecto de mercancías, donde estaría incluida la Plataforma Logística de Talavera, “va más deprisa”, por lo que se “hará a más fuerza a medio plazo” a esta infraestructura.
Para finalizar, el presidente también ha hablado de la conexión entre dicha plataforma y el puerto de Sines, una de las apuestas más fuertes del Gobierno de Portugal. Page anunció que se reuniría con el Consejo de Administración del puerto para abordar el proyecto de la Plataforma en Talavera.
